Entretenimiento
La batalla de El príncipe del desierto
La paz queda de lado ante promesas de riqueza; la película, que protagoniza Antonio Banderas, retrata escenarios de Qatar y Túnez
GUADALAJARA, JALISCO (22/MAR/2012).- El deseo de obtener riqueza nubla el entendimiento y tuerce los compromisos de las personas hasta hacerlas cambiar. Ese es uno de los motivos por los que se han desatado batallas encarnizadas como la que se muestra en la película El Príncipe del Desierto, dirigida por el francés Jean-Jaques Annaud.
La cinta se desarrolla en la península arábiga de principios del siglo XX, época del boom del petróleo, bajo el cielo del desierto en donde dos hombres libran una guerra. El ganador del enfrentamiento, Nesib, emir de Hobeika (Antonio Banderas) llega a un acuerdo de paz con Amar, sultán de Salmaah (Mark Strong), en el que ninguno reclamará el territorio denominado como la Franja Amarilla. Como garantía de que no se violará el acuerdo, Nesib adopta a los dos hijos pequeños de Amar, Saleeh (Akin Gazi) y Auda (Tahar Rahim), como compromiso de que ninguno invadirá al otro.
Doce años después, cuando Saleeh y Auda se vuelven jóvenes, el primero de ellos sueña con escapar de las manos de Nesib y volver con su padre; a Auda le interesan los libros y el deseo de aprender. Filmada en Qatar y Túnez durante cinco meses, la historia da un vuelco cuando Nesib recibe la visita de un petrolero de origen texano (Corey Johnson) y éste le dice que la Franja Amarilla está cargada de petróleo que promete una copiosa riqueza. El emir de Hobeika imagina un reino con caminos, escuelas y hospitales pagados con el dinero generado por el petróleo.
La película está cargada de paisajes además de las batallas en las que participan cientos de extras, caballos, camellos, aviones y tanques, sin faltar la clásica historia de amor.
El toque romántico comienza cuando Nesib planea el casamiento —con tintes políticos — de Auda con la princesa Leyla (Freida Pinto) que libera a Nesib de respetar el tratado de paz con Amar. El amor que inició en la infancia lleva a Auda y Leyla a pensar en un nuevo comienzo.
El actor español Antonio Banderas dijo a Miradas que la película permitió mostrar un poco más de la cultura árabe. “Este es un filme épico muy entretenido, pero lo importante para mí era que nos daría la oportunidad de mostrar un poco más de esta cultura, que yo considero casi mía”.
Contratiempos
La revolución en Túnez retrasó cuatro días la producción de El príncipe del desierto. El elenco regresó a los pocos días de la huida del líder Ben Alí rumbo a Arabia Saudita para concluir las escenas programadas. Cuando el director Jean-Jaques Annaud terminó la última escena, todos los involucrados se sintieron conmovidos por los momentos compartidos durante las grabaciones. “Necesitaba un director que entendiera el respeto que debíamos tener hacia el mundo árabe”, dice el productor Tarak Ben Ammar, quien convenció a George Lucas de filmar escenas de Star Wars en su Túnez natal hace tiempo atrás.
Acción
Elenco multiestelar
El Príncipe del Desierto se estrena mañana en las salas de cine de México. La historia está basada en la novela South of the Heart, del escritor suizo Hans Ruesch.
El elenco está conformado por Antonio Banderas, Mark Strong, Akin Gazi, Tahar Rahim, Corey Johnson, Freida Pinto, Riz Ahmed, Liya Kebede.
El nombre de Jean-Jacques Annaud
El científico loco detrás de las cámaras
Jean-Jacques Annaud, el director de El príncipe del desierto, tiene el aire de un científico loco: cabello rizado y blanco y no deja de reírse. Pero su nombre refiere a un director de cine de la vieja escuela y un viajero imparable.
Jean-Jacques Annaud rodó La victoria cantando en Camerún a los 32 años, con este filme ganó en 1976 el Oscar a Mejor película extranjera. Su trabajo lo ha llevado a filmar en Kenia (La guerra del fuego), el Himalaya (Siete años en el Tíbet), varias en monasterios alemanes (El nombre de la rosa) y la selva de Tailandia (Dos hermanos).
“Me faltaba trabajar en Oriente Medio. Estaba sorprendido de escuchar tantas cosas malas y decidí viajar con mi familia a Yemen. La gente era extraordinariamente amable y cálida; quería recuperar esa complejidad en una película. Luego, en un viaje a Omán hace unos tres años, recibí la novela y la leí en las dunas. Así supe que eso era lo que estaba buscando”.
El reparto de El príncipe del desierto incluye una actriz india, Freida Pinto (Quisiera ser millonario), un francés de origen argelino (Tahar Rahim, que se consagró con su papel protagónico en El profeta), un inglés (Mark Strong), además de cuarenta tunecinos, dos turcos, tres egipcios, un camerunés, una somalí, varios pakistaníes y marroquíes, y un árabe-español, que es como se define Antonio Banderas.
La cinta se desarrolla en la península arábiga de principios del siglo XX, época del boom del petróleo, bajo el cielo del desierto en donde dos hombres libran una guerra. El ganador del enfrentamiento, Nesib, emir de Hobeika (Antonio Banderas) llega a un acuerdo de paz con Amar, sultán de Salmaah (Mark Strong), en el que ninguno reclamará el territorio denominado como la Franja Amarilla. Como garantía de que no se violará el acuerdo, Nesib adopta a los dos hijos pequeños de Amar, Saleeh (Akin Gazi) y Auda (Tahar Rahim), como compromiso de que ninguno invadirá al otro.
Doce años después, cuando Saleeh y Auda se vuelven jóvenes, el primero de ellos sueña con escapar de las manos de Nesib y volver con su padre; a Auda le interesan los libros y el deseo de aprender. Filmada en Qatar y Túnez durante cinco meses, la historia da un vuelco cuando Nesib recibe la visita de un petrolero de origen texano (Corey Johnson) y éste le dice que la Franja Amarilla está cargada de petróleo que promete una copiosa riqueza. El emir de Hobeika imagina un reino con caminos, escuelas y hospitales pagados con el dinero generado por el petróleo.
La película está cargada de paisajes además de las batallas en las que participan cientos de extras, caballos, camellos, aviones y tanques, sin faltar la clásica historia de amor.
El toque romántico comienza cuando Nesib planea el casamiento —con tintes políticos — de Auda con la princesa Leyla (Freida Pinto) que libera a Nesib de respetar el tratado de paz con Amar. El amor que inició en la infancia lleva a Auda y Leyla a pensar en un nuevo comienzo.
El actor español Antonio Banderas dijo a Miradas que la película permitió mostrar un poco más de la cultura árabe. “Este es un filme épico muy entretenido, pero lo importante para mí era que nos daría la oportunidad de mostrar un poco más de esta cultura, que yo considero casi mía”.
Contratiempos
La revolución en Túnez retrasó cuatro días la producción de El príncipe del desierto. El elenco regresó a los pocos días de la huida del líder Ben Alí rumbo a Arabia Saudita para concluir las escenas programadas. Cuando el director Jean-Jaques Annaud terminó la última escena, todos los involucrados se sintieron conmovidos por los momentos compartidos durante las grabaciones. “Necesitaba un director que entendiera el respeto que debíamos tener hacia el mundo árabe”, dice el productor Tarak Ben Ammar, quien convenció a George Lucas de filmar escenas de Star Wars en su Túnez natal hace tiempo atrás.
Acción
Elenco multiestelar
El Príncipe del Desierto se estrena mañana en las salas de cine de México. La historia está basada en la novela South of the Heart, del escritor suizo Hans Ruesch.
El elenco está conformado por Antonio Banderas, Mark Strong, Akin Gazi, Tahar Rahim, Corey Johnson, Freida Pinto, Riz Ahmed, Liya Kebede.
El nombre de Jean-Jacques Annaud
El científico loco detrás de las cámaras
Jean-Jacques Annaud, el director de El príncipe del desierto, tiene el aire de un científico loco: cabello rizado y blanco y no deja de reírse. Pero su nombre refiere a un director de cine de la vieja escuela y un viajero imparable.
Jean-Jacques Annaud rodó La victoria cantando en Camerún a los 32 años, con este filme ganó en 1976 el Oscar a Mejor película extranjera. Su trabajo lo ha llevado a filmar en Kenia (La guerra del fuego), el Himalaya (Siete años en el Tíbet), varias en monasterios alemanes (El nombre de la rosa) y la selva de Tailandia (Dos hermanos).
“Me faltaba trabajar en Oriente Medio. Estaba sorprendido de escuchar tantas cosas malas y decidí viajar con mi familia a Yemen. La gente era extraordinariamente amable y cálida; quería recuperar esa complejidad en una película. Luego, en un viaje a Omán hace unos tres años, recibí la novela y la leí en las dunas. Así supe que eso era lo que estaba buscando”.
El reparto de El príncipe del desierto incluye una actriz india, Freida Pinto (Quisiera ser millonario), un francés de origen argelino (Tahar Rahim, que se consagró con su papel protagónico en El profeta), un inglés (Mark Strong), además de cuarenta tunecinos, dos turcos, tres egipcios, un camerunés, una somalí, varios pakistaníes y marroquíes, y un árabe-español, que es como se define Antonio Banderas.