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El sonido de Moser llega al FCM

El violonchelista alemán Johannes Moser visita por primera vez México para participar en el Festival Cultural de Mayo.

GUADALAJARA.- El Festival Cultural de Mayo (FCM) propone realizar mañana un viaje musical por el siglo romántico, el XIX. Los encargados de llevar al público por esta travesía serán los músicos de la Filarmónica de Jalisco con su primer concierto dentro de la undécima edición del prestigioso encuentro cultural dedicado en esta ocasión a Alemania, conducidos por su director titular, Héctor Guzmán.

El programa diseñado conjuntamente por los directores del FCM, Sergio Alejandro Matos Uribe, y de la formación musical más representativa del Estado se compone de obras de Engelbert Humperdinck (obertura de Hänsel y Gretel), de Richard Wagner (Preludio y Muerte de Amor, de la ópera Tristán e Isolda) y de Paul Hindemith (Metamorfosis sinfónicas sobre temas de Carl Maria von Weber), tres de los compositores alemanes más importantes de todos los tiempos.

“Como Alemania es la invitada este año del Festival Cultural de Mayo, quisimos hacer una combinación de obras que representara la riqueza musical de este país en un solo programa”, señala Héctor Guzmán.

Uno de los principales atractivos de este concierto en el Teatro Degollado es la presencia como solista de uno de los violonchelistas más aclamados del momento, el alemán Johannes Moser, para abordar antes del intermedio el Concierto para violonchelo y orquesta del compositor checo Antonin Dvorak.

Escrito durante la estancia de Dvorak en Nueva York, entre el 8 de noviembre de 1894 y el 9 de febrero de 1895, el Concierto para violonchelo y orquesta debe a la intensidad expresiva y a la energía de sus melodías su éxito, sobre todo por las versiones de los grandes intérpretes como Rostropovich.

Moser asegura que esta pieza del mayor representante de la música nacional checa del siglo XIX contiene exigencias de gran dificultad, tanto para la orquesta -“debe tocar piano”- como para el solista. “Lo más difícil para el violonchelista en este concierto es el ensamble con la orquesta, es decir, que no suene solamente como un concierto para violonchelo y orquesta. Realmente, esta obra es como una sinfonía para violonchelo y orquesta, o sea, el chelo se integra tanto a la orquesta que parece un instrumento más de la agrupación y eso es, desde mi perspectiva, lo más complejo: lograr esa combinación perfecta para no interrumpir el flujo de lo que es el aspecto orquestal. Lo difícil es obtener un balance entre ser el solista, por un lado, y por otro, ser parte del ensamble.

Por eso tampoco hay que exagerar mucho el aspecto de solista y hacer cosas extravagantes, para no sacrificar lo que es el ensamble en general”, expresa el músico nacido hace 28 años en Múnich, que despertó interés internacional en 2002 al ganar el prestigioso Concurso Tchaikovsky.

Héctor Guzmán ha calificado como “un gran honor” poder trabajar por primera vez con “un solista de la categoría” de Johannes Moser, quien tampoco escatima elogios para la Filarmónica de Jalisco, destacando su “entusiasmo”; para el Teatro Degollado, sorprendiéndole de que haya “algo tan hermoso en México”; ya hasta para el Mercado Libertad, mejor conocido como Mercado San Juan de Dios. Asegura incluso que la visita a este lugar emblemático de Guadalajara le ha cambiado la vida.

RECUADRO

En síntesis

QUÉ. Concierto. Obras: Obertura de Hänsel y Gretel, de Engelbert Humperdinck; Concierto para violonchelo y orquesta, de Antonin Dvorak; Preludio y Muerte de Amor, de Tristán e Isolda, de Richard Wagner; y Metamorfosis sinfónicas sobre temas de Carl Maria von Weber, de Paul Hindemith
QUIÉN. Filarmónica de Jalisco. Director: Héctor Guzmán. Solista: Johannes Moser (violonchelista)
CUÁNDO. Domingo 11 de mayo, 12:45 horas
DÓNDE. Teatro Degollado

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