Economía
Hasta el 2014 se decide futuro de refinería en Tula
Con la reforma se tendrá acceso a capital privado y contar con socios estratégicos: Miguel Tame
Según el director de Pemex Refinación, Miguel Tame, las prioridades de esta subsidiaria son reducir las pérdidas, que este año alcanzarán un total de 131,000 millones de pesos; por lo tanto, los estudios de ingeniería básica para la nueva planta, a cargo de ICA Fluor, estarán listos en abril del 2014, al mismo tiempo que los estudios para la reconfiguración o aprovechamiento de residuales y el nuevo tren de refinación de la refinería existente.
Después, dijo, se comenzará la construcción de la coquizadora que requiere la planta actual de Tula para reutilizar combustóleo, lo que llevará una inversión de 4,000 millones de dólares.
“Y en ese momento haremos un corte de caja, para ver los recursos, y tendremos que tomar la decisión de en dónde pongo a la nueva refinería”, aseguró, “para el mes de abril tendremos que tomar la decisión de dónde ponemos nuestro dinero, dónde es más rentable”.
Primero, Salina Cruz
Al concluir su participación en el Congreso Nacional de Ingeniería Civil, organizado por el Colegio de Ingenieros Civiles de México, el titular de Pemex Refinación explicó también que con la autorización del director general, Emilio Lozoya, se iniciaron también los estudios de ingeniería de la refinería de Salina Cruz, Oaxaca, que es la más grande del sistema, con 330,000 barriles diarios, que se venden al precio de los combustibles en el litoral del Pacífico, superior en 5 dólares a los combustibles del Golfo, lo que vuelve prioritaria también su reconversión.
“Es imperdonable que no caminemos rápido a hacer la refinería de Salina Cruz de alta conversión”, expresó y aseguró que esta reconversión tendrá un costo de 3,480 millones de dólares, que también se presupuestarán, antes de revalorar la construcción de una nueva refinería.
Además, la demanda de combustibles en el Bajío, que ha tenido un crecimiento mayor al del centro del país, pone también como una prioridad la reconversión de la refinería de Salamanca, que requerirá 3,200 millones de dólares.
El directivo de Pemex justificó el retraso de la construcción de la nueva refinería con el argumento de que la inversión realizada tendrá un rendimiento de 13.6% de tasa interna de retorno, mientras que las reconfiguraciones, de 19.6%, según los estudios de la subsidiaria.
Karol García
kgarcia@eleconomista.com.mx
El Economista