Economía
Carece EU de pruebas de que tomate con salmonela provenga de México
El secretario de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, Michael Leavitt, precisó que la FDA aún no determina que los tomates que provocaron un brote de salmonela en 12 entidades ese país sean de origen mexicano.
México.- Entrevistado después de desayunar con integrantes de la Cámara Americana de Comercio, el funcionario estadunidense destacó que los gobiernos de ambas naciones trabajan en conjunto para encargarse del asunto con responsabilidad.
Sostuvo que existe la sensibilidad necesaria en torno a la importancia del tomate en materia económica y reconoció la disponibilidad del gobierno mexicano para solucionar el problema.
Durante el desayuno, el funcionario estadunidense explicó que su visita a México pretende ampliar las fronteras para plantear la seguridad y calidad que exigirá su país en las importaciones de productos y servicios.
La ampliación cada vez mayor del universo de importaciones a la Unión Americana, que este año representarán dos mil 300 millones de dólares, hace imposible contar con inspectores en los 300 puntos por donde entran los productos y servicios, opinó.
Por ello, detalló, se establecerá un proceso en el que personal de confianza, que provendría de la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA, por sus siglas en inglés), observará todos los procesos para el ingreso de artículos y servicios a territorio estadunidense.
Expuso que ya se han establecido acuerdos con países como China e India y ahora se hace con México, a fin de dar a conocer las exigencias de Estados Unidos para garantizar la seguridad e inocuidad de las compras del exterior.
Ese objetivo requiere de trasparencia y de normas que se elaboren de manera conjunta entre los países que venden sus productos a Estados Unidos y en este caso se inician las negociaciones con México que es el segundo país en importancia en la materia, precisó.
A su parecer, la estrategia es la más adecuada en el marco de la globalización, la cual obliga a los países a aprender a colaborar entre sí para crecer, y advirtió que quienes pretendan sustraerse de esa dinámica están destinados al fracaso.
El funcionario estadunidense abundó que se ha pensado en abrir más oficinas de la FDA en el extranjero para cooperar con las autoridades locales en cuanto al estado de los productos que se pretende importar, como las que se tienen en China, India y algunas naciones de Centroamérica.
Agregó que se ha empezado a trabajar con el gobierno mexicano con la idea de informar sobre los requisitos que debe cubrir un bien o servicio para que esté disponible en la Unión Americana.
Sostuvo que existe la sensibilidad necesaria en torno a la importancia del tomate en materia económica y reconoció la disponibilidad del gobierno mexicano para solucionar el problema.
Durante el desayuno, el funcionario estadunidense explicó que su visita a México pretende ampliar las fronteras para plantear la seguridad y calidad que exigirá su país en las importaciones de productos y servicios.
La ampliación cada vez mayor del universo de importaciones a la Unión Americana, que este año representarán dos mil 300 millones de dólares, hace imposible contar con inspectores en los 300 puntos por donde entran los productos y servicios, opinó.
Por ello, detalló, se establecerá un proceso en el que personal de confianza, que provendría de la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA, por sus siglas en inglés), observará todos los procesos para el ingreso de artículos y servicios a territorio estadunidense.
Expuso que ya se han establecido acuerdos con países como China e India y ahora se hace con México, a fin de dar a conocer las exigencias de Estados Unidos para garantizar la seguridad e inocuidad de las compras del exterior.
Ese objetivo requiere de trasparencia y de normas que se elaboren de manera conjunta entre los países que venden sus productos a Estados Unidos y en este caso se inician las negociaciones con México que es el segundo país en importancia en la materia, precisó.
A su parecer, la estrategia es la más adecuada en el marco de la globalización, la cual obliga a los países a aprender a colaborar entre sí para crecer, y advirtió que quienes pretendan sustraerse de esa dinámica están destinados al fracaso.
El funcionario estadunidense abundó que se ha pensado en abrir más oficinas de la FDA en el extranjero para cooperar con las autoridades locales en cuanto al estado de los productos que se pretende importar, como las que se tienen en China, India y algunas naciones de Centroamérica.
Agregó que se ha empezado a trabajar con el gobierno mexicano con la idea de informar sobre los requisitos que debe cubrir un bien o servicio para que esté disponible en la Unión Americana.