Deportes
Bolt deslumbra el año
El jamaiquino demostró su supremacia en las pistas de atletismo y se confirma como el más veloz sobre las tierra
BERLÍN, ALEMANIA.- El jamaicano Usain Bolt fue el protagonista absoluto del año en el atletismo y confirmó su heroica actuación de los Juegos de Pekín-2008, al colgarse tres oros en el Mundial de Berlín, incluyendo los de 100 y 200 metros con récords mundiales, con lo que acaparó portadas y elogios.
Las plusmarcas de las pruebas reinas de la velocidad quedaron fijadas en las marcas 'extraterrestres' de 9.58 y 19.19 y tan sólo quedó sin récord en su victoria con el equipo jamaicano en el relevo 4x100 metros.
Su impresionante actuación volvió a dejar en la sombra al estadounidense Tyson Gay y al también jamaicano Asafa Powell.
"¿Si me estoy acostumbrando a ganar? Uno nunca puede acostumbrarse. Ganar tres oros en Berlín es maravilloso y estoy orgulloso de mí mismo", aseguró Bolt.
La pequeña isla caribeña aprovechó la competencia en el Olímpico berlinés para asumir el poder en la velocidad, tanto por los oros de Bolt como por los de la representación femenina, donde brilló el relevo 4x100 metros y Shelly Ann Frazer y Kerron Stewart lograron un 'doblete' de oro y plata en el hectómetro femenino.
Estados Unidos pudo consolarse con los éxitos de Allyson Felix en 200 metros y LaShawn Merritt y Sanya Richards en 400 metros, además de los relevos masculino y femenino de 4x400 metros. En el medallero, dominó con 22 preseas, diez de ellas doradas, mientras que Jamaica fue segunda con trece, siete de oro.
Además del cambio en la hegemonía de la velocidad, Berlín-2009 sirvió para que el etíope Kenenisa Bekele consiguiera el doblete 5 mil y 10 mil metros, por primera vez en un Mundial, un año después de haberlo logrado ya en los Juegos de Pekín.
La representación latinoamericana batió su récord de medallas, con un total de nueve, seis de ellas procedentes de la delegación cubana.
Pero si un nombre resultó polémico fue el de la sudafricana Caster Semenya, ganadora de los 800 metros y protagonista de una gran controversia por las dudas existentes sobre su sexo, que motivaron la apertura de una investigación por la Federación Internacional (IAAF).
Entre las grandes decepciones estuvieron el cubano Dayron Robles, retirado en la semifinal de 110 metros vallas con problemas físicos y la rusa Yelena Isinbayeva, que perdió su corona planetaria de salto con garrocha ante la polaca Anna Rodowska, tras tres saltos nulos en las series.
La 'zarina', galardonada en octubre en España con el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes, curó sus heridas con un nuevo récord mundial, elevando la marca a 5.06 metros, en la reunión de Zúrich a finales de agosto.
Isinbayeva también fue una de las ganadoras del 'jackpot' de un millón de dólares de la Golden League, junto a Bekele y Richards, al imponerse en la misma prueba de las seis etapas del circuito (Berlín, Oslo, Roma, París, Zúrich y Bruselas).
En 2010, esta competencia cambiará de formato y pasará a llamarse Liga de Diamante, englobando a las catorce principales reuniones atléticas de la temporada, con el objetivo de relanzar aún más su importancia en el calendario.
Entre los aspectos sombríos del año estuvo la continuación del 'caso Marion Jones', con la retribución de los metales ganados por la atleta estadounidense, que en 2007 confesó haberse dopado durante su carrera, en los Juegos Olímpicos de Sydney-2000.
También fue muy comentado el caso del bahreiní Rashid Ramzi, oro en los mil 500 metros de Pekín-2008, que dio positivo en un control antidopaje y fue instado por la autoridad olímpica a devolver su presea.
Una de las grandes historias de superación personal la protagonizó Alemayehu Bezabeh, que se proclamó campeón europeo de cross, después de haber llegado a Madrid desde Etiopía en situación legal irregular y haber dormido en la calle, antes de reconducir su vida al atletismo y obtener la nacionalidad española.
En 2010, el Mundial en sala de Doha será la principal cita, en una temporada de transición antes del próximo gran evento planetario al aire libre, en 2011 en Daegu (Corea del Sur), y los Juegos de Londres-2012.
Con sus triunfos en el Mundial de Atletismo, el velocista jamaiquino confirma en 2009, por qué es llamado el hombre más veloz de la tierra
Usain Bolt se colgó tres oros en el Mundial de Berlín, incluyendo los de 100 y 200 metros con récords mundiales, con lo que acaparó portadas y elogios.
La rusa Yelena Isinbayeva perdió su corona mundial de salto con garrocha ante la polaca Anna Rodowska, tras tres saltos nulos en las series.
Las plusmarcas de las pruebas reinas de la velocidad quedaron fijadas en las marcas 'extraterrestres' de 9.58 y 19.19 y tan sólo quedó sin récord en su victoria con el equipo jamaicano en el relevo 4x100 metros.
Su impresionante actuación volvió a dejar en la sombra al estadounidense Tyson Gay y al también jamaicano Asafa Powell.
"¿Si me estoy acostumbrando a ganar? Uno nunca puede acostumbrarse. Ganar tres oros en Berlín es maravilloso y estoy orgulloso de mí mismo", aseguró Bolt.
La pequeña isla caribeña aprovechó la competencia en el Olímpico berlinés para asumir el poder en la velocidad, tanto por los oros de Bolt como por los de la representación femenina, donde brilló el relevo 4x100 metros y Shelly Ann Frazer y Kerron Stewart lograron un 'doblete' de oro y plata en el hectómetro femenino.
Estados Unidos pudo consolarse con los éxitos de Allyson Felix en 200 metros y LaShawn Merritt y Sanya Richards en 400 metros, además de los relevos masculino y femenino de 4x400 metros. En el medallero, dominó con 22 preseas, diez de ellas doradas, mientras que Jamaica fue segunda con trece, siete de oro.
Además del cambio en la hegemonía de la velocidad, Berlín-2009 sirvió para que el etíope Kenenisa Bekele consiguiera el doblete 5 mil y 10 mil metros, por primera vez en un Mundial, un año después de haberlo logrado ya en los Juegos de Pekín.
La representación latinoamericana batió su récord de medallas, con un total de nueve, seis de ellas procedentes de la delegación cubana.
Pero si un nombre resultó polémico fue el de la sudafricana Caster Semenya, ganadora de los 800 metros y protagonista de una gran controversia por las dudas existentes sobre su sexo, que motivaron la apertura de una investigación por la Federación Internacional (IAAF).
Entre las grandes decepciones estuvieron el cubano Dayron Robles, retirado en la semifinal de 110 metros vallas con problemas físicos y la rusa Yelena Isinbayeva, que perdió su corona planetaria de salto con garrocha ante la polaca Anna Rodowska, tras tres saltos nulos en las series.
La 'zarina', galardonada en octubre en España con el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes, curó sus heridas con un nuevo récord mundial, elevando la marca a 5.06 metros, en la reunión de Zúrich a finales de agosto.
Isinbayeva también fue una de las ganadoras del 'jackpot' de un millón de dólares de la Golden League, junto a Bekele y Richards, al imponerse en la misma prueba de las seis etapas del circuito (Berlín, Oslo, Roma, París, Zúrich y Bruselas).
En 2010, esta competencia cambiará de formato y pasará a llamarse Liga de Diamante, englobando a las catorce principales reuniones atléticas de la temporada, con el objetivo de relanzar aún más su importancia en el calendario.
Entre los aspectos sombríos del año estuvo la continuación del 'caso Marion Jones', con la retribución de los metales ganados por la atleta estadounidense, que en 2007 confesó haberse dopado durante su carrera, en los Juegos Olímpicos de Sydney-2000.
También fue muy comentado el caso del bahreiní Rashid Ramzi, oro en los mil 500 metros de Pekín-2008, que dio positivo en un control antidopaje y fue instado por la autoridad olímpica a devolver su presea.
Una de las grandes historias de superación personal la protagonizó Alemayehu Bezabeh, que se proclamó campeón europeo de cross, después de haber llegado a Madrid desde Etiopía en situación legal irregular y haber dormido en la calle, antes de reconducir su vida al atletismo y obtener la nacionalidad española.
En 2010, el Mundial en sala de Doha será la principal cita, en una temporada de transición antes del próximo gran evento planetario al aire libre, en 2011 en Daegu (Corea del Sur), y los Juegos de Londres-2012.
Con sus triunfos en el Mundial de Atletismo, el velocista jamaiquino confirma en 2009, por qué es llamado el hombre más veloz de la tierra
Usain Bolt se colgó tres oros en el Mundial de Berlín, incluyendo los de 100 y 200 metros con récords mundiales, con lo que acaparó portadas y elogios.
La rusa Yelena Isinbayeva perdió su corona mundial de salto con garrocha ante la polaca Anna Rodowska, tras tres saltos nulos en las series.