Deportes
* “Una golondrina...”
A propósito, por Jaime García Elías
Lo más fácil —el tópico, el lugar común, pues— sería decir que la primera del Torneo de Apertura fue una jornada de ensueño...
Que lo fue para el futbol de Jalisco en pleno, porque sus equipos retuvieron siete de nueve puntos disputados. Que lo fue para las “Chivas”, porque Sergio Rodríguez consiguió la nota aprobatoria toda vez que en su debut no cometió ningún error que gravitara en el resultado, y porque en los goles del Cruz Azul tuvo muy poco margen de maniobra para evitarlos; que, incluso, sobresalió por el penalty que le detuvo a Sabah en su primera intervención en el circuito grande. El destino le puso una prueba de fuego, y el bisoño guardameta la resolvió con excepcional solvencia.
*
En esa misma tónica del debut soñado, estarían los “Tecos” y el Atlas: los primeros al ganar como visitantes; los rojinegros, al ensañarse con los “Jaguares” en una jornada estupenda para su legión extranjera, que se repartió una excelente cosecha de cinco goles.
Sin embargo, mientras siga siendo cierto que “una golondrina no hace verano”, lo más saludable, para cerrar la puerta a las frustraciones, será esperar antes de echar a vuelo las campanas...
*
En el caso del Guadalajara, si bien es cierto que Rodríguez, en su debut, impidió que los devotos de la causa le suspiraran a Michel, no sucedió lo mismo con respecto al “Maza” Rodríguez. Sin señalar “chivos expiatorios”, el Cruz Azul abrió brechas, con relativa facilidad, en la defensiva rayada. Y en el otro capítulo, aunque Arellano se justificó con su velocidad y con su gol, a la ofensiva rojiblanca le faltaron variantes... y una presencia en el área más inquietante para el rival.
De los “Tecos”, se impone subrayar que debutar ante un cuadro que se encuentra en pleno proceso de integración como equipo —compárese su alineación del sábado con la de su reciente coronación en el circuito de ascenso—, es, para cualquiera, una ventaja significativa. Y del Atlas, si una semana antes se dijo que el 3-0 al Libertad de Asunción tenía su mérito, desde luego, pero no como para darle la dimensión de proeza, otro tanto habrá que decir del 5-0 a unos “Jaguares” erráticos a la defensiva —los tres primeros goles fueron sendos regalos— e inoperantes cuando buenamente llegaban a hacerse del balón.
Calma, pues, y a lo mejor nos amanecemos...
Que lo fue para el futbol de Jalisco en pleno, porque sus equipos retuvieron siete de nueve puntos disputados. Que lo fue para las “Chivas”, porque Sergio Rodríguez consiguió la nota aprobatoria toda vez que en su debut no cometió ningún error que gravitara en el resultado, y porque en los goles del Cruz Azul tuvo muy poco margen de maniobra para evitarlos; que, incluso, sobresalió por el penalty que le detuvo a Sabah en su primera intervención en el circuito grande. El destino le puso una prueba de fuego, y el bisoño guardameta la resolvió con excepcional solvencia.
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En esa misma tónica del debut soñado, estarían los “Tecos” y el Atlas: los primeros al ganar como visitantes; los rojinegros, al ensañarse con los “Jaguares” en una jornada estupenda para su legión extranjera, que se repartió una excelente cosecha de cinco goles.
Sin embargo, mientras siga siendo cierto que “una golondrina no hace verano”, lo más saludable, para cerrar la puerta a las frustraciones, será esperar antes de echar a vuelo las campanas...
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En el caso del Guadalajara, si bien es cierto que Rodríguez, en su debut, impidió que los devotos de la causa le suspiraran a Michel, no sucedió lo mismo con respecto al “Maza” Rodríguez. Sin señalar “chivos expiatorios”, el Cruz Azul abrió brechas, con relativa facilidad, en la defensiva rayada. Y en el otro capítulo, aunque Arellano se justificó con su velocidad y con su gol, a la ofensiva rojiblanca le faltaron variantes... y una presencia en el área más inquietante para el rival.
De los “Tecos”, se impone subrayar que debutar ante un cuadro que se encuentra en pleno proceso de integración como equipo —compárese su alineación del sábado con la de su reciente coronación en el circuito de ascenso—, es, para cualquiera, una ventaja significativa. Y del Atlas, si una semana antes se dijo que el 3-0 al Libertad de Asunción tenía su mérito, desde luego, pero no como para darle la dimensión de proeza, otro tanto habrá que decir del 5-0 a unos “Jaguares” erráticos a la defensiva —los tres primeros goles fueron sendos regalos— e inoperantes cuando buenamente llegaban a hacerse del balón.
Calma, pues, y a lo mejor nos amanecemos...