Deportes
* La lista
A propósito por Jaime García Elías
La conquista de la Copa Oro, desde luego, pero, sobre todo, el aplastante 5-0 --que nadie en sus cabales se hubiera imaginado-- del triunfo sobre Estados Unidos en la Final, otorgaron a Javier Aguirre, esta vez en bandeja de plata, el beneficio de la duda...
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Aunque no faltarán quienes cuestionen algunas de sus decisiones, lo más probable es que la lista de seleccionados, difundida ayer, para el partido del próximo 12 de agosto ante Estados Unidos, dentro de la eliminatoria mundialista, suscite menos manifestaciones de reprobación que las anteriores del propio Aguirre y de Hugo Sánchez y Sven-Goran Eriksson, sus dos malhadados predecesores.
La famosa lista, sin embargo, aun a sabiendas de que no pasa de ser una retahíla de nombres propios, que por sí misma no garantiza el funcionamiento que se pretende ni los resultados que se buscan, amerita un análisis...
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De entrada, la inclusión de Ochoa y Corona --el titular y el suplente en la Copa Oro-- como únicos guardametas, sugiere que Aguirre, con mucha sensatez, piensa más en el futuro que en el pasado; en consecuencia, de momento al menos, parece dar por cerrados los ciclos de Oswaldo Sánchez y el “Conejo” Pérez.
Para el bloque defensivo, aunque sostiene al “Gringo” Castro y a Óscar Rojas, quienes dejaron muchas dudas en sus exámenes más recientes, Aguirre parece ir, en lo que cabe, a la segura al convocar a los “europeos” Márquez, Osorio y Salcido. Otro tanto ocurre con el medio campo, al reincorporar a Guardado, quizás el jugador mexicano de recorridos largos --a diferencia de Giovani, especialista en maniobrar en espacios reducidos-- más desequilibrante del presente.
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A cambio de omitir a Vuoso, Arce y Sinha, presentes en las etapas anteriores, deja a Medina y Sabah, pese a que tampoco alcanzaron calificaciones nítidamente aprobatorias en la Copa Oro. Y lo más sorprendente: convoca a Nery Castillo...
Este último vivió sus mejores momentos como seleccionado en la Copa Oro de Venezuela... hace dos años. Desde entonces, ni en Inglaterra, con el Manchester City; ni en Ucrania, con el Shakhtar, ni en México, cuando ha sido llamado al “Tri”, ha tenido la continuidad que debería ser requisito para estar en la Selección.
(En efecto: queda la sospecha de que si Castillo fuera tan buen futbolista como parece, no estaría tanto tiempo en la banca... Y ni siquiera del equipo: del estadio).
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Aunque no faltarán quienes cuestionen algunas de sus decisiones, lo más probable es que la lista de seleccionados, difundida ayer, para el partido del próximo 12 de agosto ante Estados Unidos, dentro de la eliminatoria mundialista, suscite menos manifestaciones de reprobación que las anteriores del propio Aguirre y de Hugo Sánchez y Sven-Goran Eriksson, sus dos malhadados predecesores.
La famosa lista, sin embargo, aun a sabiendas de que no pasa de ser una retahíla de nombres propios, que por sí misma no garantiza el funcionamiento que se pretende ni los resultados que se buscan, amerita un análisis...
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De entrada, la inclusión de Ochoa y Corona --el titular y el suplente en la Copa Oro-- como únicos guardametas, sugiere que Aguirre, con mucha sensatez, piensa más en el futuro que en el pasado; en consecuencia, de momento al menos, parece dar por cerrados los ciclos de Oswaldo Sánchez y el “Conejo” Pérez.
Para el bloque defensivo, aunque sostiene al “Gringo” Castro y a Óscar Rojas, quienes dejaron muchas dudas en sus exámenes más recientes, Aguirre parece ir, en lo que cabe, a la segura al convocar a los “europeos” Márquez, Osorio y Salcido. Otro tanto ocurre con el medio campo, al reincorporar a Guardado, quizás el jugador mexicano de recorridos largos --a diferencia de Giovani, especialista en maniobrar en espacios reducidos-- más desequilibrante del presente.
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A cambio de omitir a Vuoso, Arce y Sinha, presentes en las etapas anteriores, deja a Medina y Sabah, pese a que tampoco alcanzaron calificaciones nítidamente aprobatorias en la Copa Oro. Y lo más sorprendente: convoca a Nery Castillo...
Este último vivió sus mejores momentos como seleccionado en la Copa Oro de Venezuela... hace dos años. Desde entonces, ni en Inglaterra, con el Manchester City; ni en Ucrania, con el Shakhtar, ni en México, cuando ha sido llamado al “Tri”, ha tenido la continuidad que debería ser requisito para estar en la Selección.
(En efecto: queda la sospecha de que si Castillo fuera tan buen futbolista como parece, no estaría tanto tiempo en la banca... Y ni siquiera del equipo: del estadio).