Cultura
Helen Escobedo pierde la lucha contra el cáncer
La creadora plástica tenía 76 años de edad cuando ocurrió su deceso, en su domicilio de San Jerónimo en la Ciudad de México
CIUDAD DE MÉXICO (18/SEP/2010).- La artista visual y escultora Helen Escobedo, quien recibió el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2009 en el campo de las Bellas Artes, falleció el pasado jueves a causa de un daño orgánico progresivo derivado del cáncer.
La creadora plástica tenía 76 años de edad cuando ocurrió su deceso, en su domicilio de San Jerónimo, al Sur de la Ciudad de México.
De acuerdo con datos del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Escobedo nació en la capital del país el 28 de julio de 1934, fue discípula de Ramón Cueto y sus primeros estudios de escultura los realizó con Germán Cueto, en 1951. Estuvo becada en Europa de 1952 a 1956, por el Royal College of Art, de Londres. Su primera exposición individual la presentó a su regreso a México, en la Galería de Arte Mexicano.
Mathías Goeritz la invitó a participar en La Ruta de la Amistad, una serie de esculturas con motivo de los Juegos Olímpicos de 1968 celebrados en México. Para este proyecto realizó la escultura Puertas al viento, de 17 metros de altura, que hasta la fecha está en pie en Cuemanco, en la Ciudad de México.
En el mismo estilo de escultura monumental diseñó la pieza Señales, para la ciudad de Auckland, Nueva Zelanda, de 15 metros de altura, instalada en un parque con vista a la bahía.
Comprometida con el entorno
En la década de 1970 empezó a desarrollar su interés por la relación ser-entorno y su búsqueda se enfocó en la integración del arte y el espacio. Fue pionera del arte instalación que cuestiona la relación de las personas con su ambiente.
En 1978, junto con un equipo de cinco colegas escultores, emprendió el diseño y supervisión de El Espacio Escultórico de la UNAM.
A lo largo de su trayectoria desarrolló unas 30 obras basadas principalmente en problemas urbanos y ecológicos y de varios ambientes donde realizó arte efímero, como el Bosque de Chapultepec.
Igualmente, en la Kunstlerhaus Bethanien, de Berlín, Alemania; el Contemporary Arts Center, de Nueva Orleans, Estados Unidos, y en el Helsingin Kaupungin Taidemuseo, en Helsinki, Finlandia.
En estos trabajos utilizó materiales de desecho como ramas, troncos y hojas secas, entre otros.
Activa hasta el final
En 2009 se le otorgó el Premio Nacional de Ciencias y Artes en el campo de las Bellas Artes.
Ese mismo año realizó la exposición Éxodos en la Plaza Juárez, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, integrada por 101 figuras humanas hechas de trapo y varilla que evocan a los miles de seres expulsados de su tierra.
La creadora plástica tenía 76 años de edad cuando ocurrió su deceso, en su domicilio de San Jerónimo, al Sur de la Ciudad de México.
De acuerdo con datos del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Escobedo nació en la capital del país el 28 de julio de 1934, fue discípula de Ramón Cueto y sus primeros estudios de escultura los realizó con Germán Cueto, en 1951. Estuvo becada en Europa de 1952 a 1956, por el Royal College of Art, de Londres. Su primera exposición individual la presentó a su regreso a México, en la Galería de Arte Mexicano.
Mathías Goeritz la invitó a participar en La Ruta de la Amistad, una serie de esculturas con motivo de los Juegos Olímpicos de 1968 celebrados en México. Para este proyecto realizó la escultura Puertas al viento, de 17 metros de altura, que hasta la fecha está en pie en Cuemanco, en la Ciudad de México.
En el mismo estilo de escultura monumental diseñó la pieza Señales, para la ciudad de Auckland, Nueva Zelanda, de 15 metros de altura, instalada en un parque con vista a la bahía.
Comprometida con el entorno
En la década de 1970 empezó a desarrollar su interés por la relación ser-entorno y su búsqueda se enfocó en la integración del arte y el espacio. Fue pionera del arte instalación que cuestiona la relación de las personas con su ambiente.
En 1978, junto con un equipo de cinco colegas escultores, emprendió el diseño y supervisión de El Espacio Escultórico de la UNAM.
A lo largo de su trayectoria desarrolló unas 30 obras basadas principalmente en problemas urbanos y ecológicos y de varios ambientes donde realizó arte efímero, como el Bosque de Chapultepec.
Igualmente, en la Kunstlerhaus Bethanien, de Berlín, Alemania; el Contemporary Arts Center, de Nueva Orleans, Estados Unidos, y en el Helsingin Kaupungin Taidemuseo, en Helsinki, Finlandia.
En estos trabajos utilizó materiales de desecho como ramas, troncos y hojas secas, entre otros.
Activa hasta el final
En 2009 se le otorgó el Premio Nacional de Ciencias y Artes en el campo de las Bellas Artes.
Ese mismo año realizó la exposición Éxodos en la Plaza Juárez, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, integrada por 101 figuras humanas hechas de trapo y varilla que evocan a los miles de seres expulsados de su tierra.