Cultura
Educación, la exigencia de Elena Poniatowska
Con la conferencia El mundo también está en las letras, la autora inauguró las actividades del Festival Otoño Cultural en el CUCEA
GUADALAJARA, JALISCO.- Para Elena Poniatowska, los jóvenes tienen que inventar su propio lema de protesta, gritar a todo pulmón aquello deseado y manifestar lo que quieren, así lo comentó ayer la escritora, quien recibió un reconocimiento a su vida en las letras por parte del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (
CUCEA), de la Universidad de Guadalajara.
La autora de la Noche de Tlatelolco fue la encargada de inaugurar las actividades de la decimoquinta edición del Festival Otoño Cultural, organizado por el CUCEA. La también periodista impartió la conferencia titulada El mundo también está en las letras, después contestó las preguntas de los universitarios.
Mientras en dos pantallas se proyectaban distintas fotografías de Elena Poniatowska, la autora ingresó al Auditorio Central a las 11:30 horas y fue recibida por un aplauso prolongado y una comunidad universitaria de pie que esperaba escucharla.
La intervención comenzó con una frase nostálgica: “Vi unas fotos mías, me da un poco de tristeza verlas porque tengo 77 años. Yo creo que en esas fotos, no todas, se remontan a cuando yo tenía, supongo que no sé…”, el silencio de Poniatowska fue aplaudido.
El tema que tocó fue “uno que a todos nos duele”, comentó.
Aprovechó la cercanía de la fecha del 2 de octubre para traer a la mesa lo ocurrido en aquel año de 1968, cuando el movimiento estudiantil generó la estridencia nacional.
Con una enumeración de los acontecimientos de aquella fecha, la reconocida escritora empezó su charla. Mencionó varias fechas que marcaron la historia global en aquel año. Preguntó a los asistentes si sabían quién era Ho Chi Mich. Ni una respuesta, entonces expresó: “Mira cómo se olvidan las cosas. Ho Chi Mich era un hombre que sacrificó su propia vida por Vietnam”.
Después explicaría que para México, “el 68 tiene un sólo nombre: Tlatelolco, 2 de octubre”.
La autora de crónicas y relatos de aquella época, y popularizada por dichos textos, habló de los antecedentes y de las circunstancias que condujeron a ese trágico día.
Para Poniatowska, algunas cosas han cambiado, como su conferencia, que hoy ya no se considera “asociación delictuosa”, mientras que otras situaciones permanecen, como la desigualdad y la pobreza.
Poco a poco relató los acontecimientos de 1968 y entretejiendo los fragmentos de la historia, en especial los que contó en su libro La noche de Tlatelolco. Su ponencia concluyó con las incógnitas, la principal: el número de muertos en la Plaza de las Tres Culturas.
Después le pidió a los universitarios que tomaran el micrófono y fueran ellos quienes la cuestionaran. Poniatowska respondió por casi una hora las interrogantes de los asistentes.
La primera cuestión fue cuál es la lucha actual de México. Respondería: “Es la persecución del narcotráfico”. Aunque muchas de las inquietudes de los universitarios revelaban su principal interés por develar la vida de una figura como Elena Poniatowska.
“Mi vida es la de una ama de casa”, dijo… También es abuela de 10 nietos, comentó la autora nacida en Francia.
La periodista destacó la importancia de la educación en el país y la necesidad de que la población tenga acceso a este derecho: “Sin educación vamos totalmente hacia el suicidio, esta es una universidad y aquí lo podemos decir, con educación podemos lograr lo que queramos y ser en la vida lo que queramos, y la felicidad la depende también de la educación”.
Además recordó que hace años, en Guadalajara, “cuando vino Allende, le preguntaron qué era ser revolucionario, y él respondió: ser primero un buen estudiante”, así finalizó Elena Poniatowska su participación en el Festival Otoño Cultural.
PERFIL
Periodista y narradora nacida en París, Francia, el 19 de mayo de 1933, hija de una mexicana (Paula Amor) y un noble polaco (Jean Poniatowska). Radica en México desde 1942. Fue francesa hasta que se casó y nacionalizó mexicana. Su carrera inició en el ejercicio del periodismo y ha publicado una obra amplia que incluye varios géneros. Entre sus textos destacan: las novelas Hasta no verte Jesús mío (1969), La flor de Lis (1988) y La piel del cielo (2001); los ensayos: Todo empezó el domingo (1963), La noche de Tlatelolco (1971), Nada, nadie. Las voces del temblor (1988), Juchitán de las mujeres (testimonio, 1989); Ha recibido múltiples premios por su trabajo literario.
FRASE
“Con educación podemos lograr lo que queramos y ser en la vida lo que queramos, y la felicidad depende también de la educación”
Elena Poniatowska.
La autora de la Noche de Tlatelolco fue la encargada de inaugurar las actividades de la decimoquinta edición del Festival Otoño Cultural, organizado por el CUCEA. La también periodista impartió la conferencia titulada El mundo también está en las letras, después contestó las preguntas de los universitarios.
Mientras en dos pantallas se proyectaban distintas fotografías de Elena Poniatowska, la autora ingresó al Auditorio Central a las 11:30 horas y fue recibida por un aplauso prolongado y una comunidad universitaria de pie que esperaba escucharla.
La intervención comenzó con una frase nostálgica: “Vi unas fotos mías, me da un poco de tristeza verlas porque tengo 77 años. Yo creo que en esas fotos, no todas, se remontan a cuando yo tenía, supongo que no sé…”, el silencio de Poniatowska fue aplaudido.
El tema que tocó fue “uno que a todos nos duele”, comentó.
Aprovechó la cercanía de la fecha del 2 de octubre para traer a la mesa lo ocurrido en aquel año de 1968, cuando el movimiento estudiantil generó la estridencia nacional.
Con una enumeración de los acontecimientos de aquella fecha, la reconocida escritora empezó su charla. Mencionó varias fechas que marcaron la historia global en aquel año. Preguntó a los asistentes si sabían quién era Ho Chi Mich. Ni una respuesta, entonces expresó: “Mira cómo se olvidan las cosas. Ho Chi Mich era un hombre que sacrificó su propia vida por Vietnam”.
Después explicaría que para México, “el 68 tiene un sólo nombre: Tlatelolco, 2 de octubre”.
La autora de crónicas y relatos de aquella época, y popularizada por dichos textos, habló de los antecedentes y de las circunstancias que condujeron a ese trágico día.
Para Poniatowska, algunas cosas han cambiado, como su conferencia, que hoy ya no se considera “asociación delictuosa”, mientras que otras situaciones permanecen, como la desigualdad y la pobreza.
Poco a poco relató los acontecimientos de 1968 y entretejiendo los fragmentos de la historia, en especial los que contó en su libro La noche de Tlatelolco. Su ponencia concluyó con las incógnitas, la principal: el número de muertos en la Plaza de las Tres Culturas.
Después le pidió a los universitarios que tomaran el micrófono y fueran ellos quienes la cuestionaran. Poniatowska respondió por casi una hora las interrogantes de los asistentes.
La primera cuestión fue cuál es la lucha actual de México. Respondería: “Es la persecución del narcotráfico”. Aunque muchas de las inquietudes de los universitarios revelaban su principal interés por develar la vida de una figura como Elena Poniatowska.
“Mi vida es la de una ama de casa”, dijo… También es abuela de 10 nietos, comentó la autora nacida en Francia.
La periodista destacó la importancia de la educación en el país y la necesidad de que la población tenga acceso a este derecho: “Sin educación vamos totalmente hacia el suicidio, esta es una universidad y aquí lo podemos decir, con educación podemos lograr lo que queramos y ser en la vida lo que queramos, y la felicidad la depende también de la educación”.
Además recordó que hace años, en Guadalajara, “cuando vino Allende, le preguntaron qué era ser revolucionario, y él respondió: ser primero un buen estudiante”, así finalizó Elena Poniatowska su participación en el Festival Otoño Cultural.
PERFIL
Periodista y narradora nacida en París, Francia, el 19 de mayo de 1933, hija de una mexicana (Paula Amor) y un noble polaco (Jean Poniatowska). Radica en México desde 1942. Fue francesa hasta que se casó y nacionalizó mexicana. Su carrera inició en el ejercicio del periodismo y ha publicado una obra amplia que incluye varios géneros. Entre sus textos destacan: las novelas Hasta no verte Jesús mío (1969), La flor de Lis (1988) y La piel del cielo (2001); los ensayos: Todo empezó el domingo (1963), La noche de Tlatelolco (1971), Nada, nadie. Las voces del temblor (1988), Juchitán de las mujeres (testimonio, 1989); Ha recibido múltiples premios por su trabajo literario.
FRASE
“Con educación podemos lograr lo que queramos y ser en la vida lo que queramos, y la felicidad depende también de la educación”
Elena Poniatowska.