Cultura

Celebran apuestas museísticas

Reconocen el trabajo de Graciela de la Vega Michel quien dirige el Museo Trompo Mágico

GUADALAJARA, JALISCO (19/MAY/2011).- Los museos son, sin duda, los espacios que guardan celosamente la memoria histórica, dentro de sus paredes podemos conocer las tradiciones, costumbres y legados de culturas locales y nacionales. Ante la relevancia que revisten los museos,  se entregó por décima ocasión el Galardón al Mérito Museístico, un reconocimiento a aquellos hombres y mujeres que a través de su promotoría cultural han logrado consolidar espacios museísticos en sus respectivos municipios.

En esta ocasión, los galardonados fueron: Graciela de la Vega Michel del Trompo Mágico, Samuel Moya Ramos de San Agustín en el municipio de Tlajomulco y José Guadalupe Romero Calderón de Tala, al poniente de la Zona Metropolitana de Guadalajara. La directora del museo interactivo para niños, Trompo Mágico, Graciela de la Vega, reconoció que la popularidad que ha adquirido dicho centro de aprendizaje y recreación no hubiera sido posible sin el apoyo constante de las administraciones estatales. “No importa el gobernador que llegue, siempre ha habido compromiso por fortalecer el museo, le hemos entrado todos con decisión en nuestra labor”.

De la misma manera, de la Vega Michel, consideró que el galardón no es un mérito individual, sino que constituye una hazaña colectiva, lograda mano a mano con sus colaboradores en el Trompo Mágico. “Tengo que aclarar, el premio me emociona mucho, pero no sólo es mío; todos colaboramos y formamos parte de un equipo que ha tenido logros muy importantes”. Asimismo, la directora agradeció a los benefactores del mueso y a los medios de comunicación que con su propaganda le han impreso dinamismo a las actividades del museo.

Antes de entregar los premios a los tres promotores culturales mencionados, se llevó a cabo en la capilla Tolsá del Hospicio Cabañas, la conferencia titulada: el pasado indígena del Occidente de México, nuevos espacios y nuevas miradas, impartida por Verónica Hernández Díaz del Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México.

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