El personaje: Uno de los primeros bebés 2009

Los primeros minutos del día 1 enero de cualquier año suelen acompañarse por un ambiente festivo y fraternal en el que predominan los abrazos, las felicitaciones y la emisión masiva de buenas vibras para los 365 días que están por venir. La atmósfera familiar, aunque no en todas las ocasiones, funge como el contexto predilecto para esta celebración y el hogar es su escenario por antonomasia.

Hay infinidad de sitios en la ciudad en los que, sin embargo, el tradicionalismo de la fecha se rompe, a pesar de que la esencia se mantiene intacta: el fin y el inicio de un nuevo ciclo. (Para algunos, la idea de la felicidad tuvo este 2009 una connotación que distó de comer las 12 uvas o brindar con sidra alrededor de los seres queridos).

Dicen que para que unos puedan descansar, otros tienen que trabajar. Y así es como sucedió al interior del Hospital México Americano, ubicado cerca del nodo Colomos hacia el norte de Guadalajara. Al igual que en muchas clínicas del país, los médicos y enfermeras de guardia recibieron 2009 recorriendo los pasillos, aplicando sueros y verificando que los pacientes contaran con la atención necesaria, no sin el anhelo de estar allá afuera, donde sus respectivas familias contaban los segundos para la llegada del nuevo año.

Unos de los últimos pacientes que registraron su ingreso al México Americano el último día de2008 fueron Emanuel López Trejo, ingeniero en software, de 27 años, y su esposa Mónica Patricia Pérez Pineda, dentista, de 32 años de edad. El nacimiento de Daniel, nombre elegido para llamar a su primer hijo varón y uno de los primeros tapatíos nacidos en este nuevo año, se convirtió en la razón de que pasaran esa noche tan significativa en un hospital.

Aunque tanto Emanuel como Mónica son originarios de la Ciudad de México, llevan ya viviendo alrededor de dos años en Guadalajara. Ambos cuentan con trabajos estables aquí y el objetivo es que Daniel crezca en la capital de Jalisco.

“Teníamos la ilusión de formar una familia desde antes de casarnos. Durante mucho tiempo hablamos de tener hijos y un día decidimos iniciar con el proceso. Afortunadamente, por el mes de mayo, nos enteramos de que Mónica estaba embarazada (o estábamos embarazados)”, cuenta Emanuel. Pero el hecho “no fue algo planeado”, dice el padre con respecto al nacimiento del niño el primer día del año.

Sin embargo, añade, “teníamos la ilusión de que llegara enero, sobre todo por el hecho de que naciera junto con el año, que Daniel fuera modelo 2009 (risas). Pero, definitivamente, nos hubiera emocionado lo mismo aunque hubiese nacido a finales del año pasado. Para nosotros, lo importante es que esté bien”.

El proceso

De acuerdo a los ecosonogramas realizados a la madre en el proceso de gestación, la fecha tentativa para el alumbramiento era el 7 de enero: “sabíamos que Daniel nacería por estos días, pero no el primero del año. Nos tuvimos que adelantar porque desde el 30 de diciembre por la noche empezaron las molestias”, detalla Emanuel.

El ahora padre relata que según el dictamen de los médicos que la atendieron durante el embarazo, “la pelvis de Mónica no es muy buena, las molestias eran muy fuertes”. A razón de esta circunstancia, la futura madre fue hospitalizada la noche del 31 de diciembre.

A cada nueva contracción padecida por Mónica, “de las que en realidad no deberían de doler, el bebé golpeaba en los huesos de la pelvis de mi esposa -explica el cónyuge-. Eso le provocaba dolores de cintura muy intensos y las contracciones eran muy largas. Era una situación insostenible. Llevábamos prácticamente una noche sin dormir y todo un día de trabajo con contracciones, pero aún faltaban otras 15 horas para un trabajo de parto normal. Estaba exhausta. Esperar al alumbramiento natural era arriesgar demasiado a los dos”.

Para la dicha de sus padres y familiares, Daniel llegó a Guadalajara el 1 de enero a las 02:25 horas a través de una cesárea. Su peso fue de tres kilos con 33 gramos y alcanzó los 47.5 centímetros de longitud. De acuerdo a lo dicho por los doctores que atendieron a Mónica en la labor de parto, el estado de salud de ambos es muy bueno. Y así sucedió también con la evolución de la cirugía.

Al día siguiente del nacimiento (2 de enero, cuando se realizó esta entrevista), Mónica ya podía caminar por la habitación, que en ese momento lucía adornada con globos de colores y detalles de congratulación, lo mismo por el nacimiento que por la llegada de un nuevo año. Junto con Emanuel y el pequeño Daniel, primero vestido únicamente con un diminuto pañal y luego con un traje de punto en color amarillo, la familia López sólo esperaba la orden para ser dados de alta del hospital.

“Como todos los padres, quisiéramos que fuera un hombre de bien. A veces proyectamos las fantasías ocultas de lo que nos hubiera gustado ser en los hijos. Yo tengo muchas profesiones para él, pero será su decisión. La idea es educarlo y que sea él quien elija lo que quiere hacer de su vida”, dice Emanuel.

Medidas para el futuro

Gracias a la preocupación de sus padres, Daniel cuenta ya con el servicio de resguardo de células madre con las que se podrán prevenir y revertir algunas enfermedades que se presenten en el transcurso de su vida. ¿Y por qué optar por un hospital privado para el parto y no hacer uso del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS)? “Mi esposa trabaja en el IMSS. Tiene historias buenas y malas. Uno sabe que esta institución como respaldo es muy fuerte, pero que también tiene una gran demanda. Lo que quisimos fue estar cómodos y algunas de las políticas del Seguro no congeniaban con eso: por ejemplo, el hecho de que yo o la familia estuviéramos con Mónica en la habitación. En mi empleo cuento con un plan de seguro de gastos médicos, por eso buscamos un hospital que tuviese la infraestructura y una alta especialidad”.

En cuanto a la contratación de algún fideicomiso de estudios, sus padres aseguran que “estamos en planes desde antes de que Mónica estuviera embarazada. Debido a que tuvo que ausentarse del trabajo sin goce de sueldo en los últimos meses de gestación, fue un poco pesado empezar a ahorrar. Pero sin duda es uno de nuestros planes hacer un proyecto de ahorro para que pueda tener un mejor futuro de lo que uno puede tener en este momento”.
Pero hablando de temas financieros, ¿cuáles son las medidas que la familia López Pérez ha tomado ante la crisis económica mundial que se presentó desde antes del nacimiento de Daniel? “Digamos que, gracias a Dios, somos personas que creemos tener un resguardo divino. Afortunadamente, no nos ha faltado nada hasta el momento. La crisis la hemos sentido como todas las familias, pero no ha sido fuerte; no estamos endeudados ni tenemos la zozobra de pensar qué es lo que sucederá el día de mañana. Tenemos las dudas de todo mundo, pero el plan es ahorrar y tratar de que Daniel tenga la mejor educación y crezca en el mejor ambiente para que los momentos difíciles sean llevaderos”.



Y también en un primero de enero…

• 1788. Se creó el periódico The Time de Londres.
• 1863. El presidente Lincoln decreta la abolición de la esclavitud en todo el territorio de los Estados Unidos.
• 1873. Nació Mariano Azuela.
• 1919. Fundación del Partido Comunista alemán, por Rosa Luxemburgo, Karl Liebnecht y Guillermo Pieck.
• 1951. Se crea el Alto Comisionado de Naciones Unidas para el Refugiado (ACNUR).
• 1959. Fidel Castro se posiciona en La Habana con sus guerrilleros y el presidente Fulgencio Batista huye de Cuba.
• 1975. Es declarado Año Internacional de la Mujer.
• 1979. Estados Unidos y China Popular establecen relaciones diplomáticas. La ONU proclama a 1979 como Año Internacional del Niño.
• 1981. Grecia ingresa en la CE, convirtiéndose en el décimo miembro de esta organización.
• 1986. Ingreso de España en la CEE y entrada en vigor del IVA.
• 1993. Europa crea el Mercado único.
• 1995. Las tropas rusas toman Grozni durante la primera guerra con Chechenia.