ROTONDA del viernes 27 de noviembre del 2010

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Luciérnaga ciudadana por Guadalupe Morfín
La paz, inmenso camino
Muy rica esta semana, en Guadalajara. Inició con un foro sobre la mirada de otros continentes, como el asiático, puesta en el nuestro. Mañana arranca la FIL, con invitados especiales que van llegando de Castilla y León, a quienes damos la bienvenida. Ayer fue el lanzamiento de “Jalisco Cómo Vamos, Observatorio Ciudadano de Calidad de Vida”, y el miércoles se llevó a cabo un taller del “Observatorio prospectivo nacional relativo a los desafíos de la crisis sobre la cohesión y la estabilidad social”, un encuentro ciudadano y plural que imagina caminos para la paz en México.
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Pergeño por Víctor E. Wario
‘‘En manos de ese señor…’’
Leí hace unos días un comentario a propósito de las negociaciones que se realizaron (y las que todavía por ahí quedan) en torno al Presupuesto de Egresos de la Federación 2011, y básicamente el señalamiento del autor (que francamente no recuerdo quién era) iba en el sentido de que el grado de atraso del país, y a la vez el nivel del distanciamiento de los gobernantes de la sociedad, se expresa no en los rubros a los que asignaron más o menos recursos, sino en quienes serán los beneficiarios.
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Vitral por Javier Solórzano Zinser
Una tras otra
Más allá del lugar común, hoy como nunca vivimos en el país en donde la vida no vale nada. Van 30 muertos por la “guerra” en contra del narco, y la cifra se ha convertido en un dato que poco o nada sorprende. Se agolpan los muertos ante el desdén generalizado. La violencia está dejando de sorprender incluso a los que la viven directamente. Tiene razón el ex alcalde de Bogotá, cuando nos manda decir que no “olvidemos que son seres humanos, unos y otros”.
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Ventana por José Cárdenas
En el nombre del padre Onésimo
El obispo de Ecatepec es rico, poderoso, soberbio y muy astuto. Conoce la ley al revés y al derecho. Prefiere lo chueco. Sostiene que el Estado laico es una “jalada”. Rechaza el voto de pobreza. Es bígamo: siervo de dioses y diablos. Cultiva relaciones inconfesables con los hombres del poder. Es capaz de convertir agua bendita en agua puerca. Comparte mañas con el padre Maciel.
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