'Marketing web' de partidos: guerra sucia y pocas ideas, dice experto

CIUDAD DE MÉXICO (15/ABR/2015).- La guerra de "hashtags" que hemos visto al inicio de las campañas electorales es apenas la "punta del iceberg" de descalificaciones, pocas ideas y falta de propuestas que ocupan el centro de las estrategias ''online'' por parte de los partidos políticos, afirma Miguel Baigts Ruiz, ''especialista en web marketing''.

La potencialidad de las redes sociales está en que a través de un ''click'' se puede llegar a millones de potenciales votantes, sin embargo actualmente el manejo político está más ocupado en denostar al contrario, antes que construir una alternativa viable por lo que en ese sentido el potencial web está desperdiciado.

Para él, en la guerra sucia desatada en Internet están metidos todos los partidos y serán pocos los candidatos que no le entren a eso pues "la clave de una campaña online exitosa es tener una buena estrategia offline", asegura.

Es decir, los candidatos no deben tener “cola que les pisen, porque les van a buscar y les van a encontrar” como se vio desde el primer día de campañas federales por eso quienes busquen un cargo mediante voto popular deben conducirse de forma coherente, explica.

Baigts quien maneja 48 redes sociales de decenas de empresas y dos gobiernos extranjeros en siete idiomas, asegura que frente a los cyber ataques en un "cuarto de guerra" se decide cómo minimizar las cosas, sin embargo lo más importante es que el candidato se conduzca con seriedad, que cumpla lo que prometa.

"En online queda una huella digital, donde los ciudadanos tienen la oportunidad por primera ocasión de hacer un escrutinio de quién es, cuáles son sus pertenencias, porque en las redes sociales y en la comunicación digital no hay cómo esconderte de las cosas (como en el pasado)", sentencia el especialista.

El poder de los "bots"

Aunque ya hay una estrategia por parte de las empresas como Facebook y Twitter por desaparecer cuentas falsas identificadas como "bots", aún es un terreno fértil para la guerra sucia en redes sociales, señala el experto.

De acuerdo con el sitio Trendinalia, bastó una media hora o menos para posicionar un "hashtag" entre las principales tendencias. El 6 de abril, los "hashtags" " #FracasoComoLagrimita" " #SonPRIngaderas" fueron "Trending Topic" durante 10 horas con 40 minutos y nueve horas con 20, respectivamente.

Al día siguiente, "#PaMochesLosDelPAN" ocupó la séptima posición en el Top20 de las tendencias de México, además se posicionaron dos temas más "Beverly Hills" (4:25) y "Despilfarra Senado" (2:55).

Para el especialista en redes, quien intenta tirar un "hashtag" con otro, ignora que eso ya dejó huella digital entonces al "googlear" un asunto éste va aparecer aunque ya no sea tendencia, explica Baigts.

Afirma que la noticia política nunca para y la estrategia de redes de los partidos se basa en buscar qué elemento negativo puede destacar de sus contrincantes para viralizarlo.

Así en guerra de "bots" ganará el que haga el spot más chistoso, o el "meme", no el que hizo la mejor propuesta.

"Actualmente cada persona con un dispositivo móvil es un ‘periodista en potencia’ que de inmediato sube a la red lo que ve", así sea un anuncio indebido o un político de vacaciones llega a redes y se magnifica.

Esto es utilizado por sus adversarios para maximizarlo y viralizarlo en redes sociales, ocupando el espacio para las propuestas. Lamentablemente, los estrategas digitales de los partidos están concentrados en tratar de ocultar los elementos negativos que pueda tener el candidato o contraatacar las acusaciones con campañas de la misma baja categoría, señala el experto.

"La guerra entre el PAN y el PRI (en medios digitales) es una locura que no lleva a nada, porque ninguno está proponiendo algo interesante y porque lo que más se sabe de los candidatos son las cosas malas no las propuestas", opina Baigts, quien también tiene amplia experiencia en manejo político de redes.

Marketing digital contra el tradicional

Para Baigts, cualquier candidato que busque ganar un cargo como gobernador, diputado federal o alcalde de alguna ciudad importante debe tener forzosamente redes sociales.

La forma "tradicional" del discurso, volantes y pancartas se seguirá utilizando porque no toda la gente tiene acceso a Internet ni dispositivos móviles inteligentes, incluso puede llevar al triunfo en una elección pero sólo en comunidades más chicas donde el candidato verdaderamente tenga una empatía con esa comunidad.

Los políticos no estaban habituados a eso, incluso hay candidatos que cierran sus perfiles, o que tienen sus cuentas cerradas, pero al conocer el alcance que pueden tener ya todo lo quieren hacer por esa vía, relata.

Para el experto en redes sociales, en esas plataformas digitales los políticos deben ser coherentes "como en la vida pensar, sentir y hacer lo mismo. No puedes decir que tienes un sueldo random y al día siguiente lucir un reloj valuado en millones", sentencia.

Esto se debe a que las redes sociales son "un termómetro de la sociedad. Cuando la gente está muy molesta por algo, lo magnifican en redes sociales. Por eso hoy hay un encono impresionante".
Entonces, la estrategia digital resulta más poderosa pues se debe minimizar impacto, en tiempo real.

Independientes y partidos chicos

Los partidos "chicos" y candidatos independientes tienen la oportunidad más grande en medios digitales y redes sociales porque potencialmente se puede llegar a más gente con menos recursos económicos.

Están a un click de millones de personas. El Internet llegó a suplir de alguna manera la forma de campañas tradicionales, entonces en lugar de que gasten miles en contratación de espectaculares o en mandar a hacer "souvenirs" esos mismo recursos pueden ocuparlos en armar una buena estrategia online.

"Se trata de hablar con la neta y no tener cola que te pisen, las redes sociales se tratan de crear comunidad, no seguidores".

La clave para ellos es hablar de cosas buenas sin proselitismo, eso generará confianza y ganar de forma limpia. Si le entran a la guerra sucia, no tienen posibilidad sentencia el especialista.