La seguridad dominó la relación México-EU

CIUDAD DE MÉXICO.- El tema de la seguridad fue el eje de la relación entre México y Estados Unidos durante 2008, y la firma de la Iniciativa Mérida y la visita de los integrantes del gabinete de seguridad del presidente George W. Bush así lo muestran.

El embajador de Estados Unidos en México, Antonio O. Garza, declaró el 4 de julio, en la conmemoración de la independencia de su país, que la relación bilateral ahora "es más abierta, respetuosa, franca y honesta", aunque no deja de ser compleja.

En ese marco se presentaron varios incidentes fronterizos; se establecieron restricciones a las exportaciones de alimentos mexicanos; el Gobierno norteamericano emitió dos alertas de seguridad para viajar a México; y en Texas se ejecutó a un mexicano en violación a un fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ).

Además, el Gobierno estadounidense solicitó y obtuvo la extradición de capos del narcotráfico y puso en la "lista negra" a más de 30 personas y 20 empresas presuntamente relacionadas con el narco, pero también abrió en Ciudad Juárez un nuevo consulado, considerado el más grande del mundo.

En el transcurso del año estuvieron en México siete secretarios de despacho del presidente George W. Bush, entre ellos la canciller, Condoleezza Rice, el procurador de Justicia y el zar antidrogas, así como dos representantes personales a nivel mundial.

Incluso la señora Laura Bush, esposa del presidente estadounidense, vino al país el 14 de marzo para echar a andar un ambicioso programa en materia de lucha contra el cáncer de mama, tema ampliamente posicionado en la agenda de su país.

Con relación al tema de seguridad estuvieron en México los secretarios de la Defensa, Robert Gates, el 30 de abril; y de Seguridad Interna, Michael Chertoff, el 29 de febrero y el 17 de julio.