Fragmentada, memoria electoral

CIUDAD DE MÉXICO.-Para el espionaje civil, el 6 de julio de 1988 todavía es un tema que “forma parte de la agenda institucional”. Los documentos que pudieran existir estarían en el índice de “expedientes reservados” por 12 años que desde 2004 catalogó el Cisen.

Buscar evidencias del “fraude” de hace 20 años equivale a encontrar agua en la luna, dicen investigadores, porque una vez que las boletas fueron incineradas no hay nada y lo único que existe está disperso.

A dos décadas de dichos comicios, el perfil que ha quedado en los archivos de inteligencia civil de los principales candidatos a la Presidencia de la República es fragmentado y oficioso en el caso de Carlos Salinas, y especulativo para Cuauhtémoc Cárdenas y Manuel J. Clouthier.