México | POR LOURDES BUENO Algo huele mal Y la famosa frase de Hamlet bien puede ser aplicada a este país cuando, por las acciones de delincuentes y la incapacidad de autoridades Por: EL INFORMADOR 27 de marzo de 2010 - 02:47 hs Algo huele mal en este país, cuando quien vive tras rejas es la población honrada como protección mínima de su familia y de su patrimonio, y no los criminales que lastiman la integridad de los mexicanos. Sí, algo huele mal, cuando con pruebas armadas son apresadas mujeres indígenas y, en cambio, los muy profesionales secuestradores, que han cercenado la vida y la tranquilidad de muchos, siguen en libertad… Y la famosa frase de Hamlet bien puede ser aplicada a este país cuando, por las acciones de delincuentes y la incapacidad de autoridades en materia de secuestros, quien debe registrar su número de celular es la población que no es delincuente. Porque la molestia de la ciudadanía es evidente: más de 50% de los usuarios no se ha dado de alta y el plazo, consecuentemente, puede ser ampliado. Las razones que la población ofrece para su reticencia son reveladoras: desconfianza en un sistema que les ha fallado; la incapacidad de ese mismo sistema para detectar y apresar a los verdaderos delincuentes, y en cambio requiere, para tener algún control, registrar a la población no criminal; y, lo más grave: porque la población no sabe lo que las autoridades, que debieran protegerlos, harán con la información del registro… Sí, algo huele muy mal. Y ese mal olor continúa cuando en Monterrey se elimina la identificación de los dos estudiantes asesinados haciéndolos pasar, durante las primeras horas, como delincuentes… Algo huele mal cuando el gabinete de seguridad de Estados Unidos tiene que venir a México porque el combate al narco, de la forma que se ha elegido, lo está alarmando sobremanera y no sólo en la franja fronteriza. Algo huele mal cuando el Ejército, institución que durante décadas ha sido orgullo de este país —especialmente con la implementación del programa DN-III, y que hoy ha sido metida en esta lucha sin fin contra el narco—, tiene que salir a la palestra para decir: “No somos asesinos”… y es cierto, pero esta declaración hace evidente la carga de una responsabilidad para la que no están preparados y que, cada vez más, deja al Ejército en extrema fragilidad. Y, entonces, como en la obra de Shakespeare: lo que huele mal crea un ambiente enrarecido en donde se miran fantasmas, se habla con calaveras y se tienen infernales visiones…Y esto, para una democracia, no es el mejor de los escenarios, porque ni visiones, ni calaveras son interlocutores válidos y, sin embargo, este ambiente es el que mueve mucho de la política de este país… Sí, algo huele mal y ese olor no es precisamente en Dinamarca y tampoco será el fantasma del rey quien vendrá a sanearlo, sino la voluntad ciudadana de pedir cuentas que, al final, es la nación que lo demanda. Temas Lourdes Bueno Crimen Organizado Tertulia Lee También Violencia en Teocaltiche: Decomisan coches con reporte de robo y armas ¿Cómo se despliegan los cárteles mexicanos en Australia? Hernán cuida a Adán y ataca a Audomaro Cartucho Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones