Instalan controles para verificar más anomalías

GUADALAJARA, JALISCO (04/OCT/2010).- La presentación de incapacidades médicas apócrifas y obtenidas de blocks sustraídos de las clínicas del IMSS es sólo una de las caras de este ausentismo policial que afecta a las fuerzas de seguridad, la otra es la que surge de los mismos justificantes, pero validados indebidamente por médicos del Instituto mediante componendas con los elementos, en un tráfico con operaciones mucho más complejas –pero factibles– de detectar.
 
Así lo reconoce el titular de la Dirección de Seguridad Pública de Tlaquepaque, Héctor Córdova Bermúdez, quien apunta que entre ambas vías (justificantes apócrifos y comprados en el tráfico) se presenta 70% de las incapacidades en la corporación que tiene a su cargo, una estimación que resulta similar a la de la Policía de Guadalajara, según han denunciado sus propios elementos (en ésta se habla de 90%, EL INFORMADOR 25/6/2010).

Al seguir en una comparativa con la situación que vive la corporación de Guadalajara, dentro del alto nivel de ausentismo que registra ésta (en promedio sus policías obtienen ocho mil 29 incapacidades por año, para faltar unos 49 mil 372 días), los casos de justificantes apócrifos son mínimos, y aunque se han detectado algunos alterados por los propios oficiales, la investigación en marcha, junto a la Secretaría de la Función Pública, apunta a la compra de los documentos en el tráfico mencionado.

El director de la Policía de Tlaquepaque, Córdova Bermúdez, por su parte, informa que, en promedio, todos los días se encuentran seis de sus elementos ausentes con la presentación de estos certificados médicos, los mismos que se requieren para el patrullaje preventivo de unas 30 colonias en el municipio.

Con la información de esta dependencia también se puede apuntar que, en términos generales, cada policía se pasa 18 días incapacitado por año, de ahí que enfatice el demérito permanente al estado de fuerza de la corporación.

Dentro de estas afectaciones no se está considerando a los ocho oficiales que esa Policía tiene con una Incapacidad Parcial Permanente (IPP), y que por sus condiciones de salud no óptimas se encuentran realizando de manera definitiva tareas distintas a las de la vigilancia de las colonias y sus calles.

Aunque son 11 policías los primeros denunciados ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de Jalisco ( PGJE) por la Sindicatura de Tlaquepaque, Córdova Bermúdez expresa que, en realidad, existe un grupo mayor de entre 25 y 30 elementos en la Policía, el cual destaca y se ha identificado por concentrar la presentación de estos certificados con irregularidades, por ello la investigación interna continúa.  

Para incrementar los controles al interior de la dependencia municipal, esta administración está verificando y cotejando con el IMSS Delegación Jalisco las incapacidades que se le presentan e, incluso, el área médica de la Policía sale de sus instalaciones para participar en este mecanismo de revisión.

“Yo mando al médico de aquí para que me cheque a los policías a ver si es cierto que tienen esta enfermedad, que merecen estas incapacidades de ocho, 10 días. Nos hemos encontrado elementos que están borrachos, crudos o que andan fuera de aquí “incapacitados”, comenta.

Estas acciones emprendidas por la Dirección de Seguridad Pública han originado ya que cinco policías presentaran su renuncia.