Bush admite que no estaba preparado para la guerra

NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS.- El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, dijo que como mandatario no estaba preparado para una guerra y que en su gobierno pidió reguladores que evitaran la actual crisis financiera que recorre el mundo, en una entrevista con la cadena ABC.

Bush y su esposa Laura concedieron la entrevista para el programa World News con Charlie Gibson en Camp David, la casa presidencial de descanso, sobre sus reflexiones de los últimos ocho años en la Casa Blanca.

'Creo que no estaba preparado para la guerra; en otras palabras no hice campaña diciendo ‘por favor voten por mí, que voy a ser capaz de manejar ataques’. En otras palabras no preví una guerra', afirmó Bush.

Sobre el tema financiero, el mandatario dijo estar trabajando muy de cerca con el equipo de transición del presidente electo Barack Obama, con quien afirmó había tenido comunicación directa en asuntos relacionados con decisiones del rescate financiero.

Bush aseguró que al comienzo de su pidió reguladores que evitaran la crisis y afirmó haber tomado las medidas necesarias tras reunirse con el secretario del Tesoro, Henry Paulson, y el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, y otros que le dijeron: 'Si no actuamos con valentía vamos a entrar en una depresión mayor que la Gran Depresión del 29’.

El mandatario afirmó que por esa razón de inmediato fueron ante el Congreso para pedir el rescate de 700 mil millones de dólares, 'ya que mi actitud en esta administración es hacer todo lo posible para salvaguardar el sistema financiero y eso es lo que hemos venido haciendo'.

El presidente dijo estar muy apenado por lo que estaba pasando: 'No me gusta la idea de que la gente esté perdiendo sus empleos, o que estén preocupados por sus fondos de retiro, pero haremos lo necesario para salvaguardar el sistema'.

Sobre la candidatura de su copartidario republicano John McCain dijo que había tenido dos situaciones en su contra, la primera que era muy difícil que los estadounidenses eligieran a alguien del mismo partido para un tercer término y la difícil situación económica actual.

La primera dama Laura Bush dijo que en la visita que hizo la nueva pareja presidencial a la Casa Blanca no le había dado ningún consejo a Michelle Obama porque ella no se lo había pedido, y que se limitaron a hablar de la casa y el proceso de mudanza para la nueva familia presidencial.

'Voy a extrañar a los trabajadores de la Casa y al equipo de trabajo con quien tuve contacto a diario durante los últimos ocho años', dijo Laura Bush.

Por su parte, el presidente Bush finalizó la entrevista diciendo que al salir de la Casa Blanca 'lo voy hacer con la cabeza en alto', concluyó.