Ideas | — El del güiro Por: Jaime García Elías 24 de noviembre de 2011 - 03:46 hs — El del güiro Va de cuento... (a propósito de la ingeniosa propuesta del coordinador de la bancada priista en el Congreso del Estado, Roberto Marrufo Torres, para resolver de un plumazo la crisis de liquidez que derivó, el pasado día 15, en la incapacidad para pagar los salarios de los trabajadores: reducir la nómina. Hay mil 300 personas en dicha nómina, pero, según Marrufo, “con 600 ó 700 funciona el Congreso”... Y precisamente porque no se necesita demasiada perspicacia ni demasiada inteligencia para entender que si el aparato encargado de hacer funcionar al Poder Legislativo ha tenido una nómina costosa, obesa e improductiva, que innecesariamente incluye al doble del personal con el que podría funcionar a la perfección —es un decir—, lo abultado de la plantilla sólo puede tener una explicación lógica: la corrupción institucionalizada; las chambas en que se refugian, para medrar y vivir holgadamente, como rémoras del Presupuesto, los enjambres de zánganos, los lambiscones profesionales, los parásitos de la política, incapaces de vivir decorosamente del trabajo honrado, es probable que venga al caso la historieta que se refiere a continuación). —II— Un tipo pidió un presupuesto a la agencia especializada en amenizar fiestas. —Podemos llevarle una orquesta sinfónica, con violines, violas, cellos, contrabajos, flautas, oboes, cornos, fagotes, trombones, trompetas, percusiones y el güiro. Le costaría 500 mil pesos por toda la velada. —Es caro. Algo más modesto... —Pudiera ser una banda con instrumentos de metales y el güiro, por 200 mil. —¿Hay algo más económico todavía? —Claro: la orquesta de cámara, con ocho instrumentos de cuerda y dos flautas, por 50 mil. —¿Tiene algo más barato aún? —Por supuesto: un mariachi, con dos guitarras, guitarrón, vihuela, dos trompetas y el güiro, por 30 mil. —¿Y algo todavía más económico? —Claro: el trío, con guitarra, requinto y el güiro, por 20 mil. —¿Y lo más barato? —Claro: nuestro paquete básico: una armónica y el güiro, por cinco mil. —Oiga, ¿y si quitamos al del güiro? —Imposible, señor, porque el del güiro soy yo. —III— (Por si hubiera necesidad de explicar el chiste: en el asunto que comenzó siendo noticia y al paso del tiempo ha devenido escándalo, “los del güiro” vendrían a ser los diputados). Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones