Lucha Carlos Carrera por la libertad creativa

CIUDAD DE MÉXICO.- Carrera, uno de los pocos directores internacionales que alterna ambos géneros, está terminando un película de ficción al tiempo que ha viajado hasta el Festival de Cannes en busca de financiamiento para un largo de animación en el que ya está trabajando.

Carrera, de 46 años, que se dio a conocer a nivel internacional con La mujer de Benjamín en 1991 y logró su mayor éxito comercial con El crimen del padre Amaro, estrenó el año pasado El traspatio y tendrá lista antes de agosto De la infancia.

Basada en una novela del autor mexicano Mario González Suárez, “habla de la percepción de los niños en un ambiente de violencia intrafamiliar, que se combina con fantasmas y algunas cosas que suceden”, afirmó Carrera.

Mira al exterior

El director mexicano hace una mezcla  el cine con la televisión, los largos de ficción con los cortos de animación, como El héroe, que ganó la Palma de Oro del cortometraje en Cannes el año 1995.

Ahora prepara su primera animación larga para el cine, Ana, proyecto que le ha traído con su productor Pablo Baksht al Mercado de Cannes en busca de financianmiento internacional.

Baksht apuntó que “el presupuesto es de nueve millones de dólares, considerado bajo en países como Canadá, altísimo para México, supone tres películas de ficción grandes: tres millones es lo que se puede recuperar en el mercado interno, pero nosotros la concebimos para el mercado internacional”.

En México han reunido el 60% y con lo que cristalice de las opciones exteriores que han ido surgiendo esperan cerrar el presupuesto. Posiblemente dentro de dos semanas regresen a Francia invitados por el Festival de Annecy, una referencia internacional en el mundo de la animación.

La historia

La película transcurre en los años cincuenta y trata de una niña dejada por su padre junto con su madre en un lugar de descanso. “Poco a poco nos damos cuenta de que se trata de un hospital psiquiátrico, que la madre está internada ahí, corre peligro, y la niña la tiene que rescatar. En ese lugar las psicosis y neurosis de los enfermos se materializan y todos esos amigos imaginarios de los pacientes acompañan a Ana en su aventura”.

Contada así parece una película más de adultos que para niños, pero Carrera asegura que será muy divertida: “Habla sobre las enfermedades, de la locura, incluso de la muerte, pero es importante para nosotros encontrar una manera divertida, triste y en suma muy accesible de hablar de estos temas a los niños”, explicó. “Lo que me gusta hacer visualmente se presta muy bien para contar esta historia muy bien escrita, que tiene una vuelta de tuerca, de la cual no voy a hablar, que es maravillosa”.