Cortoplacista, estrategia ante crisis de finanzas: Concamin

CIUDAD DE MÉXICO.- La estrategia para resolver la crisis de las finanzas públicas es cortoplacista y coloca lo urgente por encima de lo importante, como lo es el empleo, sostuvo la Confederación de Cámaras Industriales ( Concamin).   

"Ya conocemos el tratamiento para enfrentar la crisis de las finanzas públicas. Se evade la debilidad estructural de las finanzas gubernamentales acudiendo a una estrategia de emergencia, cortoplacista y sin un enfoque integral", expone en su publicación mensual "Pulso industrial".  

Para el organismo, se pretende resanar el déficit sin atender sus causas ni responder al legítimo y justo reclamo de los contribuyentes cautivos, que una vez más cargarán con la mayor parte del ajuste.   

Refiere que no hay en la propuesta medidas que combatan la opacidad y la inadecuada rendición de cuentas a nivel estatal y municipal, y nada apunta hacia la simplificación en el cálculo y pago de impuestos.   

Tampoco se ofrece una estrategia para abatir la piratería, el contrabando y la informalidad, poderosas fuerzas erosivas de la legalidad, y sigue ausente el compromiso de acabar con la ineficiencia y el derroche de paraestatales como la Compañía de Luz y Fuerza del Centro, cuestiona.   

Se observa con preocupación la proclividad de algunos legisladores que sólo pretenden maquillar el problema de las finanzas públicas sin atender a su responsabilidad: impulsar los cambios que realmente necesitamos.   

"Se castiga al gasto de inversión, teniendo espacio para recortar el gasto corriente. Lo urgente vuelve a colocarse por encima de lo importante. No se trata de una auténtica reforma hacendaria", asevera.   

Para la Concamin, tiene razón la autoridad hacendaria al señalar que México no es el único país que ha propuesto elevar los impuestos para afrontar el desequilibrio fiscal dejado por la recesión.   
Sin embargo, no precisa que en el caso español (uno de los seis países citados como ejemplo) la propuesta fiscal incluye reducir cinco puntos el impuesto de sociedades (de 25 a 20 por ciento) a las empresas con menos de 25 trabajadores que conserven empleos, beneficio para más de 90 por ciento de las empresas ibéricas.   

"Pretenden atender lo urgente (mayores ingresos) sin olvidar lo importante (el empleo) ¿Recaudar más? Sí, pero sin descuidar la visión integral que es indispensable para promover la generación de riqueza y la conservación del empleo", concluye el documento.