Rusia derrota con muchos apuros a Gales

MOSCÚ, RUSIA.- Rusia derrotó con muchos más apuros de los previstos a un voluntariosa Gales (2-1) en un partido de clasificación para el Mundial de Sudáfrica 2010 disputado en Moscú bajo un auténtico diluvio.

De esta forma, los rusos inician con victoria su andadura en el Grupo 4, en el que parten como favoritos junto a Alemania, actual subcampeona de Europa.

El técnico local, el holandés Guus Hiddink, había advertido la víspera del partido a sus jugadores que no despreciaran al rival, por modesto que fuera.

En cambio, la euforia que rodea al combinado ruso desde que éste alcanzara las semifinales de la Eurocopa relajó a los futbolistas, lo que hizo creer a los galeses en la victoria, envalentonados además por el chaparrón que cayó sobre el estadio durante los 90 minutos.

Hiddink optó por el mismo equipo de la Eurocopa, con la excepción de Torbinsky; mientras el mítico técnico galés John Toshack se vio obligado a recurrir a los sub'21, debido a las numerosas bajas.

El caso es que Rusia disfrutó a los diez minutos de la primera ocasión clara del encuentro tras una gran jugada entre Arshavin y Anyukov, compañeros en el Zenit San Petersburgo.

Pavlyuchenko, recién fichado por el Tottenham de Juande Ramos, remató a la primera el centro de Anyukov, pero el balón fue despejado por el portero local.

Sin tiempo para el respiro, el medio centro ruso Semak derribó dentro del área a un delantero galés en una jugada sin aparente peligro.

Para el delirio de los aficionados rusos, Akinféev adivinó la intención de Bale y detuvo la pena máxima (m.16).

Seis minutos después, fue el ruso Zyriánov el que fue derribado en el área por un defensa visitante.

Pavlyuchenko no desaprovechó la oportunidad e inauguró el marcador, aunque el portero llegó a tocar el balón con las yemas de los dedos (m.22).

Los próximos minutos fueron un monólogo ruso, aunque los locales no lograron perforar la portería defendida por un magnífico Hennessey.

Mientras, el equipo adiestrado por Toshack se limitaba a defender como gato panza arriba.

Tras el descanso, según pasaban los minutos, los visitantes se hicieron con la iniciativa y comenzaron a arrinconar al equipo local.

Así llegó el empate (m.68) merced a una gran jugada personal de Bale, el defensa del Tottenham y mejor jugador del partido, que regateó a dos defensas y centró raso para que Ledley marcara a puerta vacía.

Rusia zozobró durante los próximos diez minutos y Gales pudo llevarse la victoria en un par de jugadas aisladas, pero la suerte no estuvo de su parte.

Mientras, Hiddink se vio obligado a sacar a un desacertado Semak e introducir al recuperado delantero Pogrebnyak (Zenit), que no pudo disputar la Eurocopa por lesión.

Cuanto los aficionados se temían lo peor, apareció Arshavin, que apenas había dado una a derechas, para encarar a su marcador y centrar al corazón del área.

Zyriánov remató de cabeza a bocajarro, pero Hennessey despejó el remate, rechace que fue aprovechado por Pogrebnyak para marcar el gol de la victoria con su pierna buena, la izquierda.

Pavlyuchenko pudo sentenciar el partido en el m.83 con un magnífico disparo desde fuera del área, pero el inconmensurable guardameta visitante despejó a córner.

Rusia, que asombró a todo el continente con su "fútbol total" durante la victoria sobre Holanda en los cuartos de final de la Eurocopa (3-1), tendrá que mejorar mucho si quiere optar al primer puerto del Grupo 4.

- Ficha técnica:

2 - Rusia: Akinféev; Anyukov, Ignashévich, Kolodin, Zhirkov; Zyriánov, Semak (Pogrebnyak, m.74), Semshov, Torbinsky (Saenko, m.60); Arshavin y Pavlyuchenko (Bystrov, m.94).

1 - Gales: Hennessey; Gunter, Bale, Fletcher, Morgan; Williams, Davies, Edwards (S.Evans), Robinson (Ricketts, m.46), Ledley; y Vokes (C.Evans, m.62).

Goles: 1-0, m.22: Pavlyuchenko (Penalti). 1-1, m.67: Ledley. 2-1, m.81: Pogrebnyak.

Árbitro: Damir Skomina (SLO). Amonestó con tarjetas amarillas a los galeses Robinson, Williams, Edwards y Ricketts.

Incidencias: partido de clasificación para el Mundial de Sudáfrica 2010 disputado en el estadio Lokomotiv Moscú ante unos 28 mil espectadores.