El beisbol boricua pierde brillo

MEXICALI, BAJA CALIFORNIA.- Eduardo Pérez, manejador de los Leones de Ponce, aseguró ser un hombre optimista que no se siente frustrado porque su equipo haya perdido sus tres primeros partidos en la Serie del Caribe, que se disputa en Mexicali.

“¿Qué me dirán ustedes si gano tres y termino con tres victorias y tres derrotas?”, preguntó Pérez en la conferencia de prensa luego del revés de su equipo por 5-2 ante los Tigres de Aragua de Venezuela, que se consolidaron como líderes con tres victorias.

Pérez reconoció que a su equipo le han salido mal las cosas, pero insistió en tener los mejores hombres, con los que intentará ganar todos los encuentros de la segunda vuelta del torneo, que empezará hoy por tarde.

“Soy un optimista y no estoy frustrado. Siempre veo el vaso medio lleno y mi equipo es capaz de ganar todo esto”, señaló.

De buen ánimo, el estratega dio mérito a su rival venezolano y lamentó que su equipo tampoco rindió bien a la defensa, pero reclamó a los árbitros porque, según él, cambiaron las reglas y dieron a los Tigres una carrera en la segunda entrada.

“Fue la primera carrerita y ahí empezó todo. Había dicho que íbamos a jugar con las mismas reglas de los dos primeros juegos, entonces dieron como doble un batazo que era sencillo y dio en una lona en el terreno. Los mentores de Venezuela y México tampoco sabían del cambio y nos costó”, lamentó.

Los Leones tienen posibilidades matemáticas de ganar la Serie, pero son casi nulas porque para conseguir el milagro, los resultados de la segunda vuelta de todos los equipos tendrían que ser diferentes a la primera para que empaten con tres juegos ganados y tres perdidos y fuese necesario un desempate.

“Lo nuestro es seguir jugando y no aceptar el fracaso”, concluyó.

Los Leones perdieron 3-2 ante los Venados de Mazatlán y 2-1 ante los Tigres de Licey dominicanos, en los dos encuentros iniciales y al caer ayer quedaron solos en el último lugar del torneo, a tres juegos de los líderes venezolanos.

Los rebasan sus rivales

Irónicamente, Puerto Rico es el segundo país con más títulos de la Serie del Caribe y sus 14 coronas sólo son superadas por las 17 de República Dominicana.

Pero los números pueden ser engañosos y requieren un examen minucioso.

Los equipos boricuas ganaron su último clásico en el 2000, cuando los Cangrejeros de Santurce se coronaron en Santo Domingo. Desde 1990, Puerto Rico apenas ha ganado cuatro cetros, mientras que República Dominicana lo hizo en 11 ocasiones en ese periodo de tiempo.

“La falta de jugadores de Grandes Ligas es una parte grande de no tener la presencia que tienen otros equipos”, comentó Pérez.

Pérez mencionó tres ingredientes que poseen los otros países participantes de la serie de los que, en su opinión, Puerto Rico carece: la presencia de jugadores de Grandes Ligas de Dominicana, el orgullo que tiene Venezuela y el patriotismo que tienen los mexicanos.

“Eso va a largo plazo, eso es algo grande”, agregó Pérez, quien debutó como manager esta temporada con los Leones.