* “Ojalá...”

Como si se hubieran puesto de acuerdo, o como si hubieran descubierto que el primer ocurrente que disparó la expresión hubieran dicho una genialidad, varios medios coincidieron en que el Guadalajara “hizo historia” al vencer a la Universidad de Chile, como visitante, y clasificar, en consecuencia, a la final de la Copa Libertadores de América.

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A ver...

Para empezar, el triunfo de las “Chivas”, sin el menor ánimo de demeritarlo, exige algunos matices. Por ejemplo, que esa victoria, desde la perspectiva de un sector muy respetable de la crítica especializada en Chile, era hasta cierto punto previsible, porque la U. había tenido mejores desempeños y conseguido mejores resultados como visitante que como local. (Aquí mismo se recogieron, de manera sumaria, esos comentarios, que se sintetizaban en la aseveración de que la U. “conjugaba mejor el verbo especular que el verbo jugar”).

De la legitimidad de la victoria del Guadalajara, la noche del martes en Santiago, no cabe la menor duda. Con todo y que las transmisiones por televisión ofrecen apenas una versión fragmentada del desempeño de los equipos, fue notorio que las “Chivas” se defendieron y atacaron mejor que los locales; que generaron más y mejores oportunidades de gol... La prensa chilena, ayer, concordaba en que en ese partido en que se disputaba el boleto para la final del torneo más trascendental del Continente y al que los protagonistas llegaban prácticamente en igualdad de circunstancias, a la postre, sin duda, ganó el mejor.

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Lo discutible es que el Guadalajara, como se afirmó insistentemente, haya hecho historia con ese resultado...

Llegar a la final de una competencia es plausible; es meritorio, por supuesto. Sin embargo, no basta con ello para hacer historia.

En el reciente Mundial de Sudáfrica, por ejemplo, todos saben que España se proclamó campeón; muchos, en cambio, habrán olvidado ya quién fue su adversario. Jacques Anquetil, varias veces campeón del “Tour de France”, solía decir que odiaba el segundo lugar “porque el segundo lugar es el campeón de los mediocres”.

En todo caso, pues, debe decirse que el Guadalajara hará historia... si vence, en la final, al rival que resulte del duelo que Sao Paulo e Internacional de Porto Alegre disputarán esta noche en el Morumbí, y que, si de ser objetivos se trata, su victoria sobre la U, de Chile lo puso a un paso de hacer historia.

Nada menos. Pero nada más.