Llevan clásico de la literatura universal a la escena operística

CIUDAD DE MÉXICO (29/JUL/2011).- El suspenso, la tensión y la dinámica de un clásico de la literatura universal cobrará vida el próximo 13 de agosto, cuando sea presentado el espectáculo operístico "Otra vuelta de tuerca", del compositor británico Benjamin Britten (1913-1976), en la Sala Miguel Covarrubias, del Centro Cultural Universitario (CCU).

De acuerdo con los organizadores, se trata de una auténtica ópera de terror, cuyo libreto es de Myfanwy Piper, y está basado en la novela corta de Henry James, en la que participan Jan Latham-Koenig como director concertador al frente del Ensamble Filarmonía, y Michael McCaffery, como director de escena.

Musicalmente, detallaron, esta ópera está basada en un tema de 12 notas que Britten manejó de manera experta a través de variaciones y transformaciones diversas.

La pieza operística aborda el tema de una institutriz que llega a una casa de campo, que está a cargo de un ama de llaves; poco tiempo después de llegar, esta descubre que los dos niños de la casa, Miles y Flora, son hostigados por los fantasmas malignos de dos antiguos sirvientes, la señorita Jessel y Peter Quint.

Lo siniestro es que los niños parecen apreciar la presencia de los espíritus, y en la lucha de la institutriz con los fantasmas, la historia da un giro trágico.

Dicho espectáculo es organizado por la Dirección General de Música de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y contará con un elenco de reconocida trayectoria: Fflur Wyn, Samuel Boden, Erin Hughes y Leopold Benedict, los cantantes británicos, además de las cantantes mexicanas Encarnación Vázquez y Lourdes Ambriz.

Considerado uno de los mejores directores de orquesta que ha producido la Gran Bretaña, la carrera de Jan Latham-Koenig abarca un amplio espectro operístico y sinfónico.

De origen francés, danés y polaco, estudió en el Real Colegio de Música de Londres, antes de ganar la prestigiosa Beca Gulbenkian.

Su debut, lo realizó dirigiendo "Macbeth" en la Opera Estatal de Viena en 1988, la cual gozó de gran éxito, lo que le llevó a la fama internacional inmediata, para dirigir más de cien funciones en Viena después de ser nombrado director huésped permanente en 1991.

Ha trabajado con importantes casas de ópera como la de Berlín, la Estatal de Viena, la de Hamburgo, la de Roma, la Nacional de París, la Real Danesa y el Covent Garden de Londres, entre otras.