Conversan en Zona Maco sobre plataformas discursivas del arte

CIUDAD DE MÉXICO (22/ABR/2012).- Una intensa jornada de actividades vivió este fin de semana la Feria Internacional de Arte Contemporáneo, Zona Maco, entre ellas, los ciclos de conferencias "Plataformas discursivas del arte" y "Aproximaciones".

En el primer ciclo se abordaron las posibilidades y los retos del trabajo editorial a partir de la publicación de catálogos, libros, publicaciones periódicas y otros dispositivos, pensados para una diversidad de intereses y perfiles.

Estas charlas, realizadas en el Centro Banamex, donde hoy concluye Zona Maco, inició con la presentación editorial de "Alias", un proyecto que "piensa" en los libros como esculturas públicas que ocupan un lugar determinado, explicó su editora, Sara Schulz.

En una conversación con la poeta mexicana Rocío Cerón, Schulz comentó que "la crisis editorial abruma debido a que autores desafían y cuestionan los pilares del mundo en el que conviven, sus derechos, la posibilidad de su reproducción y la masificación".

Agregó que ello fue planteado "dentro de una realidad donde las políticas y legislaciones desafían la creencia de que la educación y la cultura son fundamentales en la vida de las naciones".

Por otra parte y respecto al trabajo editorial en espacios museísticos, el director del Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León (MUSAC), Agustín Pérez Rubio; curadora asociada del Museo Rufino Tamayo, Magnolia de la Garza y el curador Willy Kautz coincidieron en que los museos y espacios culturales producen conocimiento, de ahí que se deba incluir la realización de catálogos.

De acuerdo con Pérez Rubio, el programa editorial debe ser expositivo, educativo, un trabajo que a partir de un proyecto presentado en un museo debe ser práctico y consensuado.

Mientras que para De la Garza, la historia del museo plantea el mapa editorial de las publicaciones del mismo, libros de lectura que servirán más delante como material de consulta o como memoria de una colección.

El programa de este ciclo concluyó con la presentación del catálogo "Poulé!", publicado bajo la curaduría de Michel Blacsubé. Se trata de una extensión de la exposición del mismo nombre, con un diseño editorial divertido e irreverente y no sólo como un material con un conjunto de imágenes.

Respecto al ciclo "Aproximaciones", cuya sede fue Zona Maco Sur los creadores Diego Pérez, Juan Capistrán y David Lamelas compartieron sus apreciaciones sobre piezas propias y comentaron con el público sus procesos de creación.

En su turno, Diego Pérez dijo que en sus piezas, donde la madera adopta diversas formas y a menudo forma arcos y estructuras que parecen jugar con la gravedad, existe una búsqueda íntima por entender el espacio.

"Conceptos como tensión, equilibrio y el dar la impresión de que cada pieza se encuentra en un estado incompleto, son parte de la estética que he querido desarrollar a lo largo de los años", explicó.

Por su parte, Juan Capistrán dijo que parte de su nueva propuesta artística se basa en la impresión que le dejó el asesinato de un amigo en la ciudad de Los Ángeles y el reflexionar sobre la violencia que existe en el entorno urbano.

De acuerdo con un comunicado del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), que da cuenta de la actividad, el artista presentó un audiovisual con una fuerte carga de violencia, tales como la tristemente célebre golpiza que un grupo de policías le propinó a Rodney King en 1991 o la represión que existe en los guetos de Los Ángeles, California, en Estados Unidos.

Mientras que el artista argentino David Lamelas, presentó también un trabajo audiovisual en el que aparece parte de su proyecto anterior titulado "Tiempo como actividad", obra sonora que muestra los sonidos de la Ciudad de México de la mañana, la tarde y la noche.

"Ese proyecto se basa en un trabajo audiovisual que realicé hace unos años en Alemania, donde filmaba un entorno urbano en tres etapas del día, en cierta manera como un simbolismo sobre el paso del tiempo", explicó.

Esta paradoja sobre el paso del tiempo lo llevó a su siguiente proyecto, con el cual quiso experimentar sobre la relatividad del proceso de envejecimiento.

"La idea de este proyecto -abundó- surgió cuando me cuestioné la edad verdadera de músicos de rock como los Rolling Stones, muchos de ellos tienen mi misma edad, y sin embargo ante la gente lucen eternamente jóvenes".