• EVENTOS DE “NOSOTROS POR LOS NIÑOS CON CÁNCER”. “El amar al prójimo como a nosotros mismos, es inseparable al amor a Dios… el resto será consecuencia de ese amor en plenitud” ** El justo se manifiesta por sus acciones hacia el prójimo; en septiembre de 1999 se fundó en Guadalajara la asociación “Nosotros por los Niños con Cáncer”, cuyo propósito era reducir la mortandad entre niños hasta los 14 años en la República Mexicana.A partir de entonces, un nuevo rumbo fue marcado al Hospital General de Occidente, donde han atendido a más de 1,300 niños y jóvenes con cáncer cuya situación socio-económica no le permite a la familia costear el tratamiento. Cuando hay un diagnóstico oportuno y el tratamiento adecuado, alrededor del 70% de los casos se recuperan.La Asociación asume los gastos de estudios de diagnóstico y de laboratorios, quimioterapia, radioterapia, medicamentos, despensas y transporte foráneo, cuenta con equipo médico especialistas en hematología y oncología pediátrica, psicólogos y voluntarios de trabajo social.Para ayudarse a solventar estos fuertes gastos, la asociación desarrolla interesantes planes, entre ellos el tradicional Bazar Anual en las instalaciones de conocido hotel que generosamente facilitan para esta noble causa.La inauguración inicia con emotiva oración de agradecimiento por las bendiciones recibidas, dirigida por la GÜERA SALAS, sumándose el nutrido grupo de señoras de nuestra sociedad, fundadoras, cofundadoras, organizadoras del bazar, todas voluntarias que trabajan en armonía.Posteriormente la Noche de Gala con vistosa pasarela de El Palacio de Hierro, la donación de un auto Infiniti y de varios regalos más. El Corporativo Andares sirvió de marc o para el coctel elegante y sumamente emotivo por la presencia de niños y jóvenes de la asociación, que desfilaron en medio de las voces de profesionales de la música, entonando “We are the world, we are the children”.Fue una noche mágica, en que la magia de la generosidad y de la lucha ante las adversidades afloró como una verdadera comunidad donde se viven los valores del Reino de Dios.