Sólo tres segundos tiene la población tapatía para reaccionar ante los sismos que se registran al norte de la Zona Metropolitana de Guadalajara, donde se encuentran la mayoría de las fallas, rumbo a Tesistán y Nextipac.Desde 1990 hasta la fecha, en esta zona se han registrado sismos desde 2 grados de magnitud, el de mayor intensidad fue uno que sucedió el 11 de mayo de 2016, con 4.9 grados de magnitud.“Estos sismos afectan a toda el área metropolitana de Guadalajara, nosotros por estar tan cerca a las fallas, tenemos un tiempo de reacción de tres segundos. Lo único que podemos hacer es construir bien bajo los códigos de Protección Civil”, detalló el doctor Quiriat Jearim Gutiérrez Peña, investigador del Centro Universitario de los Valles (CUValles).Por otra parte, la sismicidad de la parte sur de la Ciudad tiene una alineación de fallas conocida como Chapala - Oaxaca, cuyo impacto también afecta a la ZMG.Durante el El Centro Nacional de Prevención de Desastres tiene a Jalisco calificado como una zona de sismicidad severa, indicó el doctor Cristian René Escudero Ayala, investigador del CUCosta.Estas fuentes sísmicas afectan principalmente a la ZMG y a la zona de Ciudad Guzmán, de acuerdo con un informe presentado por la Red Sísmica Telemétrica de Jalisco (RSTJ)de la Universidad de Guadalajara.La RSTJ cuenta con siete estaciones en el AMG, nueve en el Sur de Jalisco y tres en la Costa. También tienen sistemas de monitoreo en Nayarit, ubicados en el Volcán Ceboruco, Volcán Sangangüey y otra la Isla María Cleofás que está por ser reactivado.MM
