La Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y el Secretariado Nacional de Pastoral Social-Cáritas Colombiana emitieron una alerta conjunta este miércoles sobre el deterioro de la situación humanitaria en la región del Ariari-Guayabero, ubicada entre los departamentos de Meta y Guaviare, en el centro de Colombia.A través de un comunicado difundido en la red social X, la ONU expresó su “profunda preocupación” por el incremento de hechos violentos en la zona, donde se reportan desplazamientos forzados, confinamientos, restricciones a la movilidad y el reclutamiento de menores. En lo que va de 2025, se han documentado 23 casos de vinculación de niños y adolescentes a grupos armados, así como amenazas contra líderes sociales, docentes y centros educativos.Por su parte, Cáritas Colombiana denunció que grupos armados al margen de la ley han cometido violaciones a los derechos humanos e infracciones al derecho internacional humanitario, en especial en municipios como Puerto Rico, Uribe y Mesetas. Estas acciones incluyen el uso de menores en el conflicto, incluso en entornos escolares, y la utilización de instalaciones civiles, como iglesias y escuelas, para fines bélicos.El director de Cáritas en Colombia, Mauricio Rey, hizo un llamado urgente a respetar los principios de distinción e inmunidad civil establecidos en el derecho internacional humanitario. Además, insistió en la protección de niños, niñas y adolescentes, y en la necesidad de mantener a la población civil al margen del conflicto armado.La región del Ariari-Guayabero ha sido históricamente golpeada por la violencia y la presencia de actores armados ilegales, lo que agrava la ya crítica situación de derechos humanos que enfrentan las comunidades campesinas e indígenas en la zona.Con información de EFE.KG
