Desde que Jorge Mario Bergoglio asumió el pontificado en marzo de 2013 como el Papa Francisco, su liderazgo fue una mezcla de esperanza y división.Conocido por su estilo humilde y su enfoque en los más vulnerables, el primer Papa latinoamericano rompió moldes en una institución milenaria, pero también desató tormentas de críticas, que lo convirtieron en una figura tan admirada como cuestionada, hasta este lunes, tras fallecer a los 88 años de edada.Uno de los temas más polémicos ha sido su posición hacia la comunidad LGBTQ+.En 2023, Francisco aprobó que los sacerdotes puedan bendecir a parejas del mismo sexo en ciertos contextos, un giro que muchos celebraron como un paso hacia la inclusión, pero que sectores conservadores tildaron de traición a la doctrina tradicional."Es una bendición, no un matrimonio", aclaró el pontífice, intentando calmar las aguas, aunque el debate sigue encendiendo pasiones dentro y fuera de la Iglesia.En septiembre de 2024, durante una rueda de prensa en su vuelo de regreso de Luxemburgo y Bélgica, el Papa Francisco calificó el aborto como "homicidio" y describió a los médicos que lo practican como "sicarios".Dichas declaraciones suscitaron críticas, especialmente entre grupos que defienden los derechos reproductivos de las mujeres, quienes consideraron sus palabras como una falta de comprensión hacia situaciones complejas que muchas enfrentan.El manejo de los casos de abuso sexual dentro del clero ha sido otro foco de controversia.Aunque ha impulsado medidas como la eliminación del secreto pontificio en casos de pederastia y ha pedido perdón públicamente, sus detractores argumentan que sus acciones han sido insuficientes.El caso del obispo chileno Juan Barros marcó un punto bajo en 2018, cuando Francisco lo defendió inicialmente, solo para retractarse tras una investigación que reveló fallos graves.Además, en 2019, el exarzobispo Theodore McCarrick fue expulsado del sacerdocio tras ser hallado culpable de abuso sexual, convirtiéndose en uno de los funcionarios eclesiásticos de mayor rango en recibir tal sanción.Su acercamiento a China ha levantado cejas. En 2018, firmó un acuerdo histórico con Pekín para regular el nombramiento de obispos, una decisión pragmática que buscaba unir a los católicos chinos, pero que fue vista por muchos como una concesión a un gobierno autoritario que reprime la libertad religiosa."Es un diálogo necesario", justificó Francisco, aunque la opacidad del pacto sigue alimentando sospechas y críticas de aquellos que consideran que la Iglesia ha cedido demasiado.Francisco ha impulsado reformas para modernizar la Curia y hacerla más transparente, pero ha encontrado una férrea oposición de sectores tradicionales.La destitución del obispo estadounidense Joseph Strickland en 2023 y el desalojo del cardenal Raymond Burke de su residencia vaticana fueron interpretados como mensajes claros contra quienes se oponen a su visión reformista.Estos movimientos, sumados a su apertura a temas como el diaconado femenino, han profundizado la brecha entre sus seguidores y sus críticos.Sus posturas económicas también han generado revuelo. Crítico del capitalismo desenfrenado, ha denunciado la "idolatría del dinero" y abogado por una Iglesia más austera, lo que le ha valido acusaciones de "marxista" por parte de algunos sectores conservadores, especialmente en Estados Unidos.Su encíclica Laudato Si’, que vincula la fe con la lucha contra el cambio climático, reforzó esta imagen progresista, pero chocó con quienes ven en ello una intromisión en temas seculares.*Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp aquí: https://whatsapp.com/channel/0029VaAf9Pu9hXF1EJ561i03 MV