Si bien la vida en Israel se paralizó por el ataque a Irán, con el país anunciando una situación de emergencia, cerrando escuelas y sinagogas y limitando el transporte público, la vida en Gaza no ha cambiado mucho, con Tel Aviv todavía atacando el enclave y la gente sufriendo por la hambruna.Lo que más preocupa ahora a los gazatíes es la mala conexión a internet, que ya desde hace varios días dificulta las comunicaciones esenciales y los sume aún más en la desesperación.Mohamed Hassan Abu Jarad, un desplazado mayor de Beit Lahia, en el Norte de la Franja, cuenta en Ciudad de Gaza que se enteró sobre el ataque israelí a Irán por la mañana del viernes.Aunque espera que ambas partes “actúen con contención”, afirma que su prioridad es recuperar el acceso a internet, una herramienta clave para entender “hacia dónde va la brújula”.“El mundo se ha convertido en una aldea global, pero nosotros ahora parecemos vivir en otro planeta”, lamenta Mohamed. “No entendemos qué pasa en el mundo, no sabemos hacia dónde van las cosas: ¿vamos hacia la paz o hacia una escalada muy peligrosa, o hacia una guerra regional?” se pregunta el señor. La conexión intermitente afecta la coordinación de servicios de emergencia como los de la Media Luna Roja, y complica la recolección de datos sobre víctimas y desaparecidos, además de impedir otras necesidades cotidianas.“El internet es como el aire que respiramos, ya no nos queda nada más”, afirma una mujer de mediana edad, en una calle de la capital gazatí. “También es una fuente de sustento para nosotros. Si queremos ganar algo de dinero, no podemos hacerlo sin conexión”, añade con preocupación.“Pedimos que se haga la paz. Queremos paz para Gaza. Queremos vivir en paz, queremos comer”, insiste. “Estamos privados de comida, tenemos hambre, nuestros hijos tienen hambre. No nos queda ninguna fuente de vida”, añade.Mientras tanto, otros temen que el foco mediático internacional se haya desplazado de Gaza hacia Irán tras el cruce de ataques entre ambos países.“Nosotros perderemos mucho, porque ahora toda la atención mediática está enfocada en Irán”, advierte Mustafa Abu Oudah. “Por eso, Israel aprovecha este momento y esta oportunidad para cometer aún más masacres aquí”, explica.Durante el viernes, al menos 21 palestinos murieron mientras trataban de recoger ayuda humanitaria, lo que eleva a 245 los fallecidos y a 2 mil 152 los heridos desde que el pasado 27 de mayo comenzara la distribución de alimento por parte de una fundación vinculada a Estados Unidos e Israel. CT