Nos cuentan que en cultura, parece que la creatividad no está en los escenarios, sino en los recortes presupuestales.Resulta que en el Presupuesto 2026 que será discutido en el Congreso de Jalisco, la propuesta del Gobierno estatal es que la bolsa para la Secretaría de Cultura subirá apenas 0.75%, lo que en lenguaje burocrático significa: “Haz más con menos”.En otras palabras: se tendría un incremento simbólico: de 707.3 millones de pesos en 2025 a 712.7 millones para el próximo año. En los hechos, eso se traduce en recortes. ¿O qué?* * *Del tema anterior, cuentan que el Festival Cultural de Mayo perdería más de cinco millones y Papirolas vería reducido su subsidio a la mitad. ¡Si la austeridad fuera un arte, ya tendríamos un Grammy!Lo curioso es que los programas exitosos son los primeros en la fila del ajuste, por eso el sector cultural ya levantó la ceja… y con justa razón.Por lo pronto, los organizadores del Festival Cultural de Mayo están sorprendidos. Están a punto de celebrar tres décadas de trayectoria y tras una edición 2025 particularmente exitosa -con 463 artistas, 21 sedes y Canadá como país invitado-, entonces resulta difícil comprender cómo el éxito podría convertirse en argumento para la austeridad.Las diputadas y los diputados tienen la última palabra. ¡A menos que Pablo Lemus dé un manotazo!* * *El buzón de quejas por el Presupuesto federal 2026 ya parece piñata en fiesta de políticos: todos quieren pegarle.Primero se quejó el gobernador, luego el PAN y ahora se suma el PRI, con Laura Haro al frente, reclamando que la Cámara de Diputados “olvidó” a Jalisco.Afirma que los proyectos estratégicos brillan por su ausencia y que la UdeG recibió un aumento tan discreto que hay que verlo con microscopio.Tonatiuh Bravo, coordinador de Hagamos y ex rector de la Universidad, también levantó la voz: el presupuesto 2026 le parece “insuficiente”.Parece que todos están de acuerdo… pero sólo para quejarse.* * *Dicen que cantar no mata a nadie… salvo que el estribillo suene muy parecido a un expediente judicial.Antonio “N”, alias “Junior H”, pensó que su voz sólo levantaría aplausos en el Palenque, pero terminó levantando una carpeta de investigación. Y es que, al parecer, la Fiscalía no se sabe la letra de “El Azul”, pero sí el Artículo 142 del Código Penal. Así que el trovador de los tumbados cambió el escenario ayer por la Vicefiscalía, y el coro de fans por un Agente del Ministerio Público.La moraleja es clara: en Jalisco, los “corridos prohibidos” pueden serlo de verdad. Cantar sobre narcos puede sonar valiente, pero ahora están enfrentando las consecuencias.