¡Lo que nos faltaba!Los gritos homofóbicos de los aficionados mexicanos al futbol, que han provocado suspensión de partidos, multas a estadios, sanciones con partidos a jugarse a puerta cerrada y severas llamadas de atención directamente desde la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA), ahora se han convertido en mensajes de odio y amenazas de muerte que han llegado a las entrañas del fútbol mexicano.El sábado pasado se conoció de la denuncia pública que hizo la árbitro mexicana Katia Itzel García, quien dijo haber recibido amenazas de muerte después el partido de la Leagues Cup entre los Rayados del Monterrey y la oncena de Cincinnati, luego de que los regiomontanos perdieran el encuentro. Aparentemente las amenazas son de presuntos aficionados de La Pandilla. “¡Rechazo total a la violencia en todos los espacios!”, escribió la silbante, al recordar que “En México, un país donde cada día son asesinadas 10 mujeres… No podemos normalizar la violencia”.Y cuando se conoce del nuevo nicho de destino de las amenazas de muerte en nuestro país, coincide con la publicación del “¿Qué preocupa al Mundo? Informe de México”-, llevado a cabo por Ipsos -empresa multinacional de investigación de mercados y consultoría con sede en París, Francia, - donde se confirma que al 54 por ciento de los mexicanos lo que más nos preocupa es el crimen y la violencia, seguido por el desempleo -35 por ciento-, la pobreza y la desigualdad social -32 por ciento-, inflación -28 por ciento- y la corrupción de los políticos -25 por ciento-.México se encuentra en el segundo sitio en el escalafón mundial donde el crimen y la violencia es lo que más preocupa a sus ciudadanos, después de Chile y Suecia, donde el 65 por ciento perciben que el problema ha superado los límites de la tolerancia y las capacidades de los gobiernos para afrontarlo.Primero fueron las disputas entre grupos delincuenciales y sus agresiones entre ellos mismos, que nos hacían concluir que “mientras no nos metamos en esos terrenos pantanosos, no hay problema”; sin embargo, el problema creció a tal extremo que hoy estamos expuestos que en cualquier parte podemos vernos involucrados en un fuego cruzado, estar en el lugar equivocado por cuestiones del destino o ser objeto de las ya muy frecuentes extorsiones a personas o negocios. Por eso, de acuerdo con la silbante aludida, “¡Rechazo total a la violencia en todos los espacios!”, pero donde además se necesita del “respaldo total” gubernamental.Usted, ¿qué opina?
