De entrada lo que habrá que cuidar, a partir de la respuesta que en 10 días den las autoridades aludidas, es que esta vez se haga un puntual seguimiento de los plazos y responsables para cumplir las recomendaciones que en materia de seguridad les hizo ayer la Comisión Estatal de Derechos Humanos.Aunque por el alto número de recomendaciones (a los titulares de los tres órdenes de Gobierno, a los alcaldes del Área Metropolitana de Guadalajara, a la Agencia Metropolitana de Seguridad, al Instituto Metropolitano de Planeación y hasta al Comité Coordinador del Sistema Estatal Anticorrupción) bien se puede decir que se trata de una nueva macro recomendación, evitaría llamarla así para no ligarla ni por semántica, a la primera que emitió la misma CEDHJ hace casi una década para, en teoría, sanear el Río Santiago, que hoy sigue más contaminado que nunca. Muy pocas de las 200 acciones, que se recomendaron a 14 gobiernos municipales, al Gobierno estatal, la Comisión Estatal del Agua y el SIAPA se cumplieron y los que ignoraron hacer la tarea gozan de plena impunidad pese a que su displicencia le echó a perder la vida a las comunidades que viven en las inmediaciones de este cuerpo de agua, considerado uno de los mayores ecocidios del mundo.La recomendación general “Queremos Paz” que emitió ayer el ombudsman Alfonso Hernández, consta de 81 recomendaciones y 120 acciones. Insisto, todos debemos cuidar que esta vez este esfuerzo institucional dispare acciones que hagan frente a la escalada de violencia que ha generado la impunidad de la que gozan grupos delincuenciales, muchos de ellos ligados a las mafias que han infiltrado no solo gobiernos y cuerpos policiales, sino que han permeado y construido una amplia base social de complicidades.Los trabajos para la elaboración de esta recomendación iniciaron hace casi un año, en parte por la insistencia de la Federación de Estudiantes Universitarios y su líder Jesús Medina, que con base en estudios y encuestas entre la comunidad universitaria, demostró el crecimiento sin precedente de los delitos contra la comunidad universitaria en los entornos de los diversos campus y preparatorias.A todos nos viene bien que la emisión de esta recomendación coincida con la espiral de violencia que padecemos desde hace semanas. No quiere decir que las autoridades a las que se dirigieron estas 81 recomendaciones deban aceptarlas a ojos cerrados, pero sin duda atenderlas y exponer cuáles aceptan y cuáles no y por qué, puede generar un debate urgente que nos involucre a todos para recuperar nuestro derecho humano a la seguridad, y que sepulte la estridencia de la clase política y gubernamental que pese a la gravedad del problema, quieren justificar con grillas la negligencia con la que han manejado este tema que debe ser su prioridad, con elecciones o sin elecciones.jbarrera4r@gmail.com
