Esa es la cuestión. El debate llegó, queramos o no. Basta asomarse a la tendencia global.En 79 de los 195 países del mundo (40%), los sistemas educativos ya lo prohíben o regulan. Tan sólo en el último año, 19 países adoptaron esta medida.Hablo de naciones como España, Francia, China, Estados Unidos, Australia…En México, sólo Querétaro lo prohibió en primarias y secundarias desde febrero pasado. Surgió de una iniciativa del gobernador panista Mauricio Kuri. Otras Entidades podrían sumarse este año.¿Ya saben a qué me refiero? A la prohibición del uso del celular en las escuelas.Hoy, por ejemplo, en el Congreso de Jalisco, se presentará una iniciativa para prohibirlo en educación básica. La mayoría de las legislaciones en el mundo restringen su uso a nivel primaria y secundaria.La UNESCO ha señalado que restringir el celular en el aula mejora la capacidad de atención y el aprendizaje.Las recomendaciones de la OMS sobre el uso de pantallas, como celulares o tabletas, son claras: los menores de 2 años no deben usarlas; entre los 2 y 5 años, el tiempo máximo recomendado es de una hora al día; y entre los 5 y 17 años, no debe exceder las dos horas diarias.El uso nocivo del celular ha dado origen a dos palabras que el Diccionario Oxford incorporó en 2024, y que reflejan esta nueva realidad.Doomscrolling, que se refiere al acto de desplazarse a través de la pantalla del teléfono por horas. Combina las palabras “doom” (condena) y “scroll” (desplazar). Podríamos entenderlo como un infinito desplazamiento zombie.Brain-rot, que se puede traducir como putrefacción cerebral. El Diccionario Oxford lo explica así: “Supuesto deterioro de las facultades mentales o intelectuales, especialmente relacionado con el abuso de contenido digital trivial o poco estimulante”.El abuso de la pantalla genera dificultades para organizar y recordar información, resolver problemas y tomar decisiones.Por supuesto, hay quienes se oponen a esta medida. Los principales argumentos son que se limita el aprendizaje del menor, se restringe su libertad y los margina de una preparación para el mundo digital.En algunos países se han establecido directrices generales de uso y las escuelas, por medio de juntas escolares, adecúan las medidas para cada caso.Padres de familia, maestros y maestras, ¿qué opinan? Los leo en @jnlomeli y jonathan.lomeli@informador.com.mx¿Prohibir o no prohibir? Esa es la cuestión.