El desalojo presuntamente violento de un campamento en Huentitán para protestar contra un desarrollo inmobiliario terminó en pleito político.Javier Armenta, presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU), acusó a la Fiscalía del Estado de abuso policial. También señaló al gobernador de enviar a sus elementos como represalia por las críticas al recorte presupuestal de la Universidad.Más tarde llegó al lugar el rector Ricardo Villanueva para respaldar al feuista y para anunciar que se sumaban a la defensa del espacio público en aquella zona.Finalmente quien respondió fue Eduardo Martínez Lomelí, alcalde tapatío, al acusar que el rector politizaba el asunto y asegurar que los vecinos apoyan el proyecto inmobiliario del lugar y el equipamiento urbano que implica.El pleito apenas comienza.* * *El Congreso fue otro escenario de escarceos en el pleito entre la UdeG y el gobierno estatal. Los diputados universitarios Mara Robles y Enrique Velázquez volvieron para arremeter en contra de sus compañeros por la “cartita” en la que pidieron el recorte al Museo de Ciencias Ambientales.En su arenga, Velázquez dijo que no es la primera vez que un “intento de dictador” atenta contra la autonomía de la Universidad y demandó que los emecistas acepten que el recorte es una revancha en contra de la Máxima Casa de Estudios por no sumarse al regreso a clases presenciales.Más de una hora duró la alegata en donde los leones negros tuvieron poca réplica, pues la caballada naranja se vio muy flaca con los diputados Javier Romo y Daniel Robles, a los que apenas les alcanzó para leer los acordeones que les pasaron sus asesores, pero rechazaron entrar en discusión.* * *Contrario a lo que se rumoró hace unos días, el proceso de transición en la administración tapatía va viento en popa.Como botón de muestra está la llegada de la nueva titular del DIF Guadalajara, Diana Vargas Salomón. Hasta hace unos días ella ocupaba el mismo cargo en el municipio de Zapopan y es una servidora pública cercana al alcalde electo, Pablo Lemus.
