Múltiples versiones se han dado de lo ocurrido en el Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Jalisco (CECyTEJ), del que “renunciaron” el miércoles pasado al exregidor, exdiputado local emecista y ex titular del Instituto de Información Estadística y Geográfica de Jalisco (IIEG) en el sexenio pasado, Augusto Valencia, quien tenía un nombramiento provisional en la dirección de ese sistema educativo estatal en el que se forman alrededor de 20 mil jóvenes.La gota que derramó el vaso fue el proceso de nombramiento de los directores de los 24 planteles que tiene el CECyTEJ, en el que los distintos grupos emecistas en el poder querían meter mano para colocar a sus allegados. Como Valencia opuso resistencia, esa junta que se tenía que realizar en sus oficinas para hacer esos nombramientos y decidir qué director se ratificaba y cuál se cambiaba de acuerdo con sus resultados, simplemente se cambió a una sala de Palacio de Gobierno, donde le dieron las gracias.En enero, apenas a un mes de haber asumido esa nueva responsabilidad, Valencia fue el único funcionario estatal que se atrevió e hizo público el desorden encontrado en esa dependencia sectorizada a la Secretaría de Educación, cuyo titular es Juan Carlos Miramontes, pero que le delega por completo a su subsecretario, Fernando Lozano, con quien Augusto tuvo serios desencuentros. Es casi regla entre la clase política y gubernamental que, cuando hay cambios de administración y el poder queda en el mismo partido político, todos deben tapar las irregularidades encontradas.Las tensiones en el CECyTEJ empezaron desde que Valencia denunció internamente que nunca hubo una entrega-recepción clara ni completa de quienes en diciembre estaban al frente de esa institución educativa, encabezados por Alejandro Gómez Guerrero, quien antes fungió como director administrativo. Y es que la titular, Alejandra Sánchez, había pedido licencia al cargo para irse de campaña electoral como candidata del partido Movimiento Ciudadano (MC) a la diputación federal por el Distrito 4, que terminó perdiendo.En sus intentos por poner orden en lo administrativo, Valencia se enfrentó desde enero con el Sindicato de Trabajadores de Educación Media Superior del CECyTEJ, que dirige María Guadalupe Íñiguez Rodríguez, quien se tomó fotografías en Palacio de Gobierno con el titular de la Secretaría General de Gobierno, Salvador Zamora, para luego acusar al entonces director de acoso, hostigamiento laboral, falta de pagos a tiempo y hasta daños a las arcas de la dependencia, con el apoyo de la dirigencia nacional de ese mismo sindicato, que luego respaldó un paro de labores.Está claro, pues, que en la pugna político-emecista por el CECyTEJ el perdedor fue Valencia. Ahora habrá que ver si tenía o no razón con base en los resultados de las auditorías tanto de la ASF como de la Contraloría estatal, de los indicadores de este sistema educativo que van en picada junto con una baja en la matrícula de estudiantes. Que pase el o la próxima.
