Viernes, 26 de Abril 2024

LO ÚLTIMO DE Ideas

Ideas |

La lucha en internet

Por: Luis Ernesto Salomón

Internet es el ámbito más profundo de la lucha electoral en esta época. Las elecciones recientes en Europa y América muestran cómo la eficacia de la comunicación en la red se ha convertido en la herramienta clave para obtener resultados.

Aunque el uso de mensajes de contraste dirigidos a polarizar a la opinión pública en torno a los temas que más tocan los sentimientos, ha sido frecuente desde hace décadas, es hasta la aparición de las redes sociales cuando su eficacia crece en un ambiente poco controlado. En ese contexto, los mensajes populistas son más penetrantes porque llegan al extremo de inducir al error o incluso mentir deliberadamente para atraer simpatías. Este ámbito difuso de la red permite una acción casi invisible que conecta más profundamente que los tradicionales mensajes en televisión y carteles.

La campaña del partido de extrema derecha alemán Alternative für Deutschland (AfD) es una muestra de ello, como antes lo fue la del Brexit y la de Trump. El partido de la derecha radical en Alemania ha logrado llegar al Parlamento, gracias a una campaña asertiva que según informes publicados en la prestigiada revista The Atlantic, ha sido impulsada por la empresa texana Harris Media, comandada por Vincent Harris de 29 años, quien a pesar de su juventud acumula gran experiencia en campañas para personajes de talla nacional en el país vecino, y ahora desembarcó con su estrategia en Alemania.

Colocar mensajes penetrantes en el momento preciso es una labor táctica que requiere de estudios sociales sistemáticos, pero la efectividad puede crecer si se crea suficiente ruido en las redes sociales que aumentan la frecuencia y alcance de los mensajes. Eso parece haber sucedido en los Estados Unidos con cuentas fantasmas de Twitter, aparentemente fueron inducidas por intereses rusos, según se ha publicado en días recientes. La multiplicación de mensajes, la suplantación y simulación de personas como la difusión de mentiras que se repiten como olas erosivas, se convierten en parte de un método de asalto para denostar y tirar por los suelos cualquier construcción de imagen pública tradicional. Así sucedió en aquellas naciones.

En México, el proceso electoral de 2018 está expuesto al uso de estos mecanismos por los partidos y los aspirantes a la presidencia. No sería extraño ver por aquí a algunos de los expertos como el señor Harris. Pero además, dado el clima de desconfianza creciente que impera en torno a la vida pública y la fuerza de la delincuencia, resulta probable que fuerzas externas pretendan influir en las plataformas de internet para favorecer intereses de todo tipo, incluso los más inconfesables.

En meses recientes hemos visto crecer la animosidad de la lucha preelectoral en las plataformas sociales de la red, y aunque la tragedia de los sismos y demás desastres, nos han enlutado y entristecido, la lucha prosigue silenciosamente. Es prácticamente imposible predecir cómo se alinearán las fuerzas políticas en los meses siguientes, pero es claro que la lucha en internet será definitiva, y en ella hay enormes espacios para recibir influencias externas evidentes u ocultas.

Si Harris Media contribuyó activamente a que los alemanes perdieran el miedo a votar por una fuerza claramente de extrema derecha, casi un partido pro nazi, con un mensaje de segregación, para lograr convertirla en la tercera fuerza en el Bundestag; es claro que aquí esa u otra empresa puede mover las emociones, incitar entusiasmo, ilusión, miedo o cualquier pasión que resulte útil para la causa que pague sus servicios.

El proceso electoral en marcha carece de mecanismos eficientes para controlar las acciones radicales y profundas en Internet, es inevitable la exposición a una lucha que probablemente combinará la suciedad de la que se quejaron en Alemania los partidos tradicionales, con el ruido multiplicado como el que se indujo en Estados Unidos. Aunque los partidos renuncien al uso recursos públicos la guerra en internet está preparada con la participación de los especialistas; para bien o para mal, es una realidad ineludible. Habrá que estar atentos para distinguir los mensajes, vigilar la actividad en las redes y procurar que la aplicación de las normas electorales sean respetadas. Ahí se dará, quizá, la batalla tácticamente más importante de las próximas campañas electorales. Aprender de las lecciones que al respecto nos dejan las experiencias de nuestros vecinos, del Reino Unido, Francia y Alemania es vital para México, que se encamina hacia un escenario agitado.

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones