Como todo un Caudillo encabezó el Presidente López Obrador la inauguración del AIFA, Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.Se le veía feliz, victorioso.Y tenía razón.Había ganado la batalla.Al frente del Ejército Mexicano y de sus huestes había conseguido lo que parecía imposible: terminar en tiempo y casi en forma un nuevo aeropuerto para dar servicio a la congestionada Ciudad de México.Gracias a la aplicación de técnicos militares se rompió aquel viejo mito de que en nuestro país las obras nunca se terminan de acuerdo a lo previsto.Además, según lo declarado por los propios militares durante la inauguración, se mantuvieron los costos programados desde un principio.Se rompía así otro mito.Pasa a segundo plano la discusión sobre si este nuevo aeropuerto realmente aligerara la carga y el caos del actual Aeropuerto de la Ciudad México donde son pan de cada día los retrasos y cancelaciones de vuelos por la saturación.También pasa a segundo plano la sospecha de que para realizar la obra del AIFA se privilegió a empresas amigas del régimen permitiendo en algunos casos el pago de sobre costos.La obra estuvo, y estuvo casi completa, con algunos faltantes.Los ingenieros militares se pulieron para hacer un gran trabajo.Y es que la inauguración del aeropuerto fue eso: un triunfo militar de un Caudillo que si algo ha demostrado es tesón y voluntad. No en vano estuvo en campaña durante 18 años hasta conseguir la Presidencia.En el caso del AIFA seguramente se empeñó y obstinó para que los tiempos se fueran cumpliendo uno a uno.Y en la ceremonia no podía dejar de hacer alusión a sus adversarios.El propio Presidente ese día hizo mención de Chumel Torres, el célebre youtuber que pronosticaba que la obra no estaría finalizada, López Obrador subió al joven Chumel a tema de interés nacional al mencionarlo en la misma mañanera.Qué papel de privilegio para el youtuber ser identificado como “el enemigo a vencer” en la batalla por la construcción del AIFA.Y también estuvo presente durante la inauguración, aunque de manera involuntaria, el ex presidente Peña Nieto cuando la esposa del Presidente, a pregunta expresa de cuánto tardaría en llegar un vuelo que esperaban, parodió al ex presidente en aquella ocasión que se hizo bolas con los tiempos en una charla con periodistas.Al escuchar la parodia López Obrador apenas hizo una mueca dando a entender que no entendió el chiste.Independientemente del destino final que tenga el AIFA, o si será útil o se convertirá en un elefante blanco, el Caudillo López Obrador celebró su triunfo, de él pero no de la 4T, porque si alguien no conocerá y mucho menos se verá favorecido con la obra son los grandes sectores de desposeídos que lo llevaron al poder y lo siguen apoyando.platapi@hotmail.com
