Las semillas de girasol son realmente sorprendentes, además de ser deliciosas, tienen una gran cantidad de beneficios para la salud. La vitamina E que contienen es un antioxidante poderoso que ayuda a proteger nuestras células del daño causado por los radicales libres. El calcio es esencial para la salud ósea, mientras que el fósforo y el magnesio son importantes para la función muscular y nerviosa. El potasio, por otro lado, es vital para mantener el equilibrio de líquidos en nuestro cuerpo.Además de todos estos nutrientes, las semillas de girasol también son una excelente fuente de ácidos grasos saludables, como el ácido linoleico, que es un tipo de grasa omega-6 que puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.Agregar semillas de girasol a tu dieta es una forma fácil y deliciosa de mejorar tu salud. Puedes disfrutarlas solas como un refrigerio satisfactorio y lleno de nutrientes, o agregarlas a tus ensaladas, yogures, cereales o batidos para obtener un impulso adicional de sabor y nutrición. Al aportar magnesio y fósforo al organismo, las semillas de girasol se convierten en grandes aliadas para el cerebro, mejorando el rendimiento mental, la capacidad de concentración y la memoria.Una forma 100% natural de tener más energía y vitalidad durante el día es consumiendo la semilla de girasol, gracias a su contenido en tiamina evita problemas nerviosos y fatiga crónica.Si lo que buscas es mantener a tu organismo lejos de virus y alergias, estas semillas ayudarán a aumentar las defensas de tu cuerpo previniendo y ayudando a combatir diferentes patologías.Las semillas de girasol también presentan un alto contenido en vitamina E que ayuda primordialmente a nutrir y rejuvenecer la dermis con su efecto antioxidante.Las mujeres al llegar a cierta edad, junto con la menopausia el cuerpo sufre una gran descalcificación en los huesos, por lo que es muy recomendado aumentar su consumo de lácteos, sin embargo las semillas de girasol también son una gran fuente natural de calcio.MF
