Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), en 2024, aproximadamente 1 de cada 5 peces que llegan a nuestros platos proviene de la pesca ilegal o irregular.Estas cifras además de impactar a las comunidades costeras y a las economías locales, también comprometen la biodiversidad marina y la salud de nuestros océanos.Sobre todo en la Cuaresma, incluir pescado en los platillos de muchos hogares de México ya es parte de la tradición. Pero, ¿te has preguntado de dónde provienen los productos del mar que llevas a la mesa? Aquí te mostramos cómo identificar si el pescado que consumimos pertenece a estas prácticas y por qué es importante evitar la compra de estos productos.En 2015, la asociación Oceana, dedicada a la preservación de los mares y océanos de nuestro planeta, advertía que solo el 1% de la pesca en México era reportada. Además, entre 2009 y 2014 se detuvieron a 1,128 personas practicando este tipo de pesca.Estos datos reflejan una situación alarmante respecto a lo que Oceana llama "lavado de pescado", ya que ha habido un claro retroceso en los avances para salvaguardar la fauna marina y su hábitat. La organización añadió que el producto falsificado está ingresando a la cadena de valor con información falsa, vendiéndose como si fuera legal.El portal de noticias científicas Gaceta UNAM, junto con el investigador del Instituto de Geografía de la Universidad, José Manuel Crespo Guerrero, menciona que la pesca ilegal no solo afecta al bienestar medioambiental, sino también al del consumidor. Al desconocer el origen del producto y las técnicas utilizadas para su captura, no sabemos si estas son peligrosas para nuestra salud, agregó el investigador.Además, la falta de controles adecuados en la pesca puede dar lugar a la venta de pescado en condiciones insalubres, lo que favorece el desarrollo de organismos patógenos que podrían representar un riesgo para la salud de los consumidores finales.En México, las especies más afectadas por esta actividad son el abulón, los pepinos de mar, la langosta, el camarón siete barbas, el pulpo y el mero. Los pescadores que siguen las normativas de la pesca legal también se ven perjudicados debido a la sobreexplotación de los recursos marinos, lo que afecta la disponibilidad de especies y reduce las capturas accesibles para aquellos que operan dentro del marco legal.Ante este panorama preocupante, aquí te presentamos las medidas que podemos tomar como consumidores.Si bien es necesario avanzar en las políticas de comercio y pesca, así como realizar una auditoría adecuada por parte de las autoridades responsables, nosotros como consumidores también podemos contribuir con las siguientes acciones:De igual manera, identificar el pescado ilegal es esencial para contribuir al consumo responsable de los productos del mar y evitar el "lavado de pescado".De acuerdo con la directora de Comunicación de Oceanena, se puede tener cuenta los siguientes puntos para identificar productos de dudosa procedencia:Estar informado y tomar decisiones responsables no solo beneficia al medio ambiente, sino que también apoya a los pescadores legales y garantiza que lo que consumimos sea seguro y sostenible para todos.* * * Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp * * *EA