Sábado, 24 de Mayo 2025

“Juego de tres”: las máscaras sociales de las familias mexicanas

La puesta en escena llega el día de mañana al Foro Inglaterra de Guadalajara, historia que retrata la intimidad de la adolescencia y el impacto de las desunión familiar 

Por: El Informador

Un diálogo entre jóvenes que invita a la reflexión sobre las relaciones familiares. ESPECIAL

Un diálogo entre jóvenes que invita a la reflexión sobre las relaciones familiares. ESPECIAL

Tres adolescentes conviven en la soledad de un salón de clases. El silencio parece la constante entre ellos, hasta que las conversaciones comienzan a fluir. Detrás de sus apariencias, los tres jóvenes comparten, aunque distintas, heridas grandes; la doble moral de un padre, el fantasma de una madre que se fue, las cicatrices que dejó el alcoholismo en una familia. Por medio de un diálogo constante, “Chavo”, “Ary” y “Miguel”, que son los inadaptados del grupo, se darán cuenta de que tienen mucho más en común de lo que creen.

Con este telón de fondo, “Juego de tres” es una obra de teatro que llega mañana, 24 de mayo, al Foro Inglaterra de Guadalajara y que retrata, desde la intimidad de la adolescencia, cosas mucho más grandes que muchas familias padecen, las cosas que se callan, los secretos, en la historia de estos tres jóvenes que, no obstante, no son lo que parecen.

Haciendo uso de la metaficción —o el metateatro— la obra es una trama dentro de otra trama: ni “Chavo”, “Ary” ni “Miguel” son unos inadaptados sociales sino todo lo contrario; son ellos los “bullies” del salón, los que molestan y son un dolor de cabeza para los maestros, y esta plática que han tenido todo el tiempo no es más que un castigo de su profesor, que los ha llevado a interpretar algo que no son, pero que los llevará a una reflexión profunda y a un acto de redención sobre lo que son y qué quieren ser.

En entrevista con EL INFORMADOR, el autor y director de la obra, Miguel Ángel Quintero, dio a conocer el proceso que llevó a la construcción del guion, el cómo aborda problemáticas familiares mexicanas en el diálogo enfocado en la juventud —que es cuando estas situaciones más duelen, pues no existe una sola familia funcional— y cómo con esto busca generar un diálogo a través de experiencias en común que todos hemos vivido dentro de las relaciones de familia.

“Lo que escribo tiene partes de lo que he vivido. Estas situaciones que se han formado y son parte del común denominador de vida de nosotros los mexicanos durante muchos años”. comentó Miguel Ángel Quintero.

“Juego de tres” está protagonizada por Fátima Meza, Kaleb Ortiz y Hannibal Michel, tres jóvenes actores que dan autenticidad al guion y vida a los dolores presentados en la trama, y que otorgaron voz a los personajes escritos por Miguel Ángel Quintero. “En Artes Escénicas trabajamos con los muchachos desde jóvenes. Kaleb y Fátima ya tienen una trayectoria importante dentro del ámbito actoral; la característica física es una de las cosas que yo manejo mucho. El tercero que es Hannibal, es un muchacho que esta es su primera obra. Él es bailarín profesional y está incursionando en el terreno actoral”, explicó el director.

Cabe señalar que la adolescencia, con todas sus glorias y desencantos, es un momento decisivo en la vida de todas las personas, marcado por la felicidad, el dolor y la incertidumbre de crecer; Miguel Ángel Quintero usó esto como fuente de inspiración para “Juego de tres”, enfatizando en que es necesario dar herramientas a los jóvenes para romper estos patrones que, más que familiares, residen en la sociedad y en la cultura. “Parte de las situaciones del alcoholismo en las familias, como cualquier familia mexicana, también se daba en la mía”, compartió el director.

“Esos usos y esas costumbres, la violencia y la doble moral parten de una generación a otra. Al que le toca romper con esas situaciones es al joven, y si no le das herramientas para que analice y vea esto, vamos a seguir en un círculo vicioso generacional”.

“Invito a la gente a que venga a conocer “Juego de tres”. Es una obra real de lo que tenemos en común en nuestros usos y costumbres de vida, pero también es para enseñarles a los jóvenes que ellos son los únicos que puedan darle una modificación a estos usos y costumbres para mejorar su vida”, finalizó el director.

El recurso del metateatro

Algo que caracterizará y diferenciará a “Juego de tres” es la adición de un elemento decisivo que para el espectador cambiará por completo la obra. Pues lo que creían hasta entonces no será cierto, los protagonistas no son quienes dicen ser, sino que, dentro de la misma historia, están actuando. El director explicó que decidió jugar así con la trama para ver la reacción del público, y también para que decidan en qué lado del relato se posicionan; en los jóvenes vulnerados, o en los jóvenes actores que, por un castigo de su profesor, se ven forzados a “actuar” esa vulnerabilidad —algo que los tres adolescentes toman como un juego al principio— para luego derivar en un revelador acto de consciencia.

“Aquí el público decide en qué parte se quiere colocar: de la vida de los personajes que están interpretando los muchachos, o de la vida de los que le vale gorro todo”, explica Miguel Ángel Quintero. “Es como una invitación a cuestionar, ¿en cuál lado te ubicas tú? ¿Le das un pensamiento más importante a la doble moral, al abandono, al alcoholismo? ¿O al pensamiento de a mí me vale todo, yo sigo viviendo, pase lo que pase?”.

Asiste a “Juego de tres”

La obra se presentará hoy y el 31 de mayo; el 21 y 28, de junio, en el Foro Inglaterra de Guadalajara —Av. Inglaterra 3227, Colonia Vallarta Sur—, a las 20:00 horas.

CT

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones