La artista española Raquel Rodrigo ha llevado al popular punto de cruz a otro nivel y es a través de la “arquicostura”, proyecto que impulsa desde hace una década desde su propio estudio y con el que colorea las calles del mundo con un peculiar diseño y técnica a gran escala.“Llevo 10 años haciendo esto y fue desde mi parte de interiorista y escaparatista. En España hicimos una decoración para una tienda de costura y se me ocurrió cómo poder sacar lo que ocurría adentro, de ahí surgió un poco el utilizar la costura en la calle”, explica Raquel Rodrigo sobre el origen de su proyecto que la llevado a replicarlo en Estados Unidos, Suiza, Milán, París, Londres y Rusia, por ejemplo.“Arquicostura, como lo indica la palabra, es la unión de la arquitectura y la costura. En Arquicostura Studio nos dedicamos, desde hace cinco años, a trabajar con interioristas y decoradores para llagar a hoteles, restaurantes y tiendas por todo el mundo, trabajamos interiorismo y fachada”.Tras visitar hace un par de años Guadalajara y quedar enamorada de la cultura mexicana, Raquel Rodrigo regresó a la metrópoli tapatía para dejar su huella en Café Correcto (calle Prisciliano Sánchez 1044), en donde añadirá su trabajo de punto de cruz con una instalación artesanal de este tradicional bordado que tendrá como eje central a las flores.“Es una casita con una puerta verde y lo estamos haciendo alrededor de la ventana unas flores. Es una intervención pequeña de momento, amenazo con volver para hacer algo más grande”, detalla Raquel Rodrigo al resaltar las dimensiones que tendrá este trabajo de 3x1.20 metros en la fachada.“Primero me mandaron la foto del edificio y trabajo desde el ordenador, busco el concepto. En esta ocasión quería hacer algo más mexicano por todo el colorido que tienen aquí, pero al final opté más por flores, trabajo mucho haciendo flores y quería dejar parte de mí, de España, aquí. Son dos flores que combinan con el turquesa que tiene el edificio”.Raquel Rodrigo considera que el punto cruz es por mucho un lenguaje creativo y bastante universal que puede apreciarse y desarrollarse en cualquier país y cultura, además de que fusionarlo con la arquitectura y el diseño ha sido la clave para que esta propuesta gane popularidad cada día: “Es lo que más me gusta, porque el punto de cruz me ha unido mi parte creativa con mis ganas de viajar y conocer más de cerca sobre otras culturas” Añade que este proyecto ha significado por mucho una manera muy divertida de atraer no solo a los apasionados por el punto de cruz, pues incluso quienes no conocen tanto de este tipo de bordado también quedan fascinados ante el colorido que las casas y calles pueden tener con una iniciativa de esta naturaleza.“Es una manera de convivir y compartir la cultura desde otro punto de vista, de crear una pieza con la misma gente del lugar. En cada sitio tiene su magia, en Rusia también tienen mucha cultura del bordado, ha habido de todo, es una forma de conocernos más y estar más cerca”.InauguraciónLa instalación de “arquicostura” de Raquel Rodrigo, se presentó desde ayer en la noche, en Café Correcto, ubicado en calle Prisciliano Sánchez 1044.
