Viernes, 29 de Marzo 2024

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Acércate a "La niña de mis ojos"

La compañía de circo Les Cabaret Capricho presenta un espectáculo interdisciplinario donde los sentidos son los protagonistas

Por: El Informador

Les Cabaret Capricho explora las percepciones de los sentidos en “La niña de mis ojos”. EL INFORMADOR/E. Barrera

Les Cabaret Capricho explora las percepciones de los sentidos en “La niña de mis ojos”. EL INFORMADOR/E. Barrera

Ver es algo que damos por sentado, pero: ¿cómo puede cambiar el mundo si cerramos los ojos? Al hacerlo, los otros sentidos se agudizan, principalmente el olfato y el oído. Las posibilidades de explorar los diferentes sentidos desde el escenario tienen en “La niña de mis ojos” un lúdico ejemplo. Les Cabaret Capricho estrena este fin de semana esta producción: un espectáculo interdisciplinario donde los sentidos son los protagonistas. Serán cuatro funciones en la Sala 4 del Conjunto Santander de Artes Escénicas.

Omar Barrios, de la compañía jalisciense, platicó sobre la creación de “La niña de mis ojos”: “Es un espectáculo que comenzamos por una curiosidad de experimentar el punto de vista que tenemos del mundo. Cómo es que creamos estos puntos de vista, cuál es el prejuicio o el dispositivo que a partir de lo que percibimos nos hace creer que algo es así”. El punto de partida fue la invidencia, de allí que durante el primer acto (el más largo), los espectadores estén con los ojos vendados, con énfasis en la experiencia sensorial; el segundo y tercer acto se enfocan en la imagen.

Para dar forma a esta puesta en escena, el equipo de Les Cabaret Capricho contó con la asesoría de varias personas: “Nos acercamos a colegas nuestros que son artistas y buenos amigos, como Mari Carmen Camarena (cantante) y  Nacho Varela (escritor y músico). Fueron parte importante durante el proceso creativo. Compartimos varias sesiones de entrenamiento. A Nacho lo invitamos a ser parte del espectáculo, va a estar en escena como actor. Nos ayudó mucho a entender sobre las posibilidades creativas que tienen los otros sentidos en cuanto a la percepción, pero también entender cómo afectan y estimulan sonidos, olores, cosas que normalmente damos por hecho cuando vemos”.

Envolver al público

Itzel Barajas, también parte de la puesta, comentó sobre la nueva perspectiva con este tipo de teatro: “Es descubrir todo lo que ya sabes pero verlo desde otro punto de vista. Cambia completamente su significado. Por ejemplo, el café que para uno es una cosa, lo vemos y sabemos cómo es... Pero cuando alguien lo plantea de forma distinta, aprendemos a saber que hay más formas, otros caminos para llegar al mismo lugar”. La Sala 4 del recinto recibe en su centro al público: en cada esquina hay diferentes sentidos que se exploran, como el del olfato con el café.

Omar agregó sobre este acomodo, novedoso para la compañía: “Este formato es la primera vez que lo vamos a hacer: el público está en el centro y todo el espectáculo se pensó para envolverlos. Es como teatro envolvente. Las coreografías suceden en los 360 grados alrededor del público, un reto supergrande”.

Fernando Manica, igualmente en escena, abundó en el tema de lo interdisciplinario, pues “La niña de mis ojos” conjuga diferentes recursos de la creación escénica: “Es una característica de la compañía, buscar justo lo interdisciplinario, donde se difuminan un poco. No es solamente la técnica del malabarismo, de circo, de teatro o de danza, sino que todo apoya para contar las historias. Que sea parte, no solo una disciplina. Es lo que planteamos en esta creación para contar estas historias”.

Con ojos vendados

Con dicho planteamiento múltiple se diseñó la producción con un formato de inmersión, afirmó Omar Barrios: “Algo que nos llamó mucho la atención cuando estuvimos entrenando con los ojos vendados era esta capacidad que da no ver, para estar al mismo tiempo adentro de uno y fuera de uno mismo. Eso es muy lindo. Normalmente con tanto estímulo visual con el que vivimos nos la pasamos afuera, aunque todo el tiempo alguien roba la atención. Pero con los ojos vendados hay que estar afuera, seguimos vivos y alertas, y al mismo tiempo hay una escucha de uno mismo muy interesante. En términos de puesta en escena nos funcionó mucho imaginar que el público era el centro del espectáculo”. De allí que la Sala 4 del Conjunto Santander se limite para una capacidad máxima de 100 personas (para mayores de nueve años).

Otros espectáculos

“La niña de mis ojos” contó con el apoyo de Proyecta Producción. Durante la presentación, despliega música original de Ernesto Cano y Óscar Coyoli.

Por otro lado, Les Cabaret Capricho recién comenzó el año con funciones de “El folk chou”, en el Teatro Experimental, mismo sitio donde presentarán “Bonito”, el próximo 27 de marzo (20:30 horas). Con ambas puestas en escena viajarán a Argentina en abril, para luego pasar por Chile y Brasil (abril y junio). En mayo regresarán al Conjunto Santander de Artes Escénicas.

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