Tecnología

Reciben a los cuatro astronautas del Atlantis como héroes

Afirman que Houston siempre es la primera palabra en el espacio

WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS (23/JUL/2011).- Los cuatro tripulantes del Atlantis fueron recibidos hoy como héroes en el Centro Johnson de la NASA en Houston (Texas), donde el comandante de la última misión de la era de los transbordadores, Chris Ferguson, recordó que "Houston es siempre la primera palabra en el espacio".

Entre vítores y aplausos, y con una enorme bandera de Estados Unidos de fondo, fueron recibidos Ferguson, el piloto Dough Hurley, y los especialistas de misión Rex Walheim y Sandra Magnus, quienes agradecieron a todos los que han trabajado en el programa de los transbordadores durante 30 años.

Durante una ceremonia en el hangar 276 de la NASA, la tripulación entregó a la alcaldesa de Houston, Annise Parker, una bandera que llevaron al espacio, porque Houston "ha sido y será la primera palabra en el espacio", dijo Ferguson, al referirse a la ciudad como punto de referencia del programa espacial.

"Aquí es donde todo empezó", dijo por su parte, la senadora republicana por Texas, Kay Bailey-Hutchinson. "Es el final de una era pero no el final de los viajes de Estados Unidos al espacio en busca del próximo reto", agregó.

"Esta es una prueba de que el sueño continúa", dijo Ferguson. "Habrá algunos desafíos en adelante, y el reto no sólo es centrarnos hacia donde nos dirigimos sino también intentar retener el interés del público estadounidense".

El programa de los transbordadores ha sido uno de los más populares de la NASA durante las tres décadas en las que ha desplegado grandes proyectos como el telescopio Hubble y el Espectrómetro Magnético Alpha-2 (AMS-2), y su gran capacidad de carga ha sido fundamental para la construcción de la Estación Espacial Internacional (EEI).

El último vuelo del Atlantis, que volvió ayer a la Tierra, fue la misión 135 para la flotilla de transbordadores que en su conjunto recorrieron 872.262.280 kilómetros durante las últimas tres décadas. Además, las cinco naves transportaron a 355 tripulantes de 16 países y, en total, permanecieron en el espacio 1.333 días, casi cuatro años.

La NASA cierra ahora esta etapa y aunque asegura que continuará con otros proyectos para liderar la exploración espacial, como un viaje a Marte en 2030, no tiene un vehículo para reemplazar a los transbordadores. Por ello tendrá que recurrir a las naves rusas Soyuz para poder viajar al laboratorio espacial.

Los astronautas, que se deshicieron en halagos a sus compañeros, recordaron algunas de las anécdotas del viaje, en el que llevaron más de cuatro mil kilos de carga para abastecer a la EEI cuando los transbordadores dejen de funcionar.

La misión fue especialmente laboriosa tomando en cuenta que, de haber surgido algún problema con el Atlantis, la única forma de regresar a Tierra hubiese sido en una Soyuz, de menor capacidad.

De ahí que se tuvieran que redoblar esfuerzos para trasladar la carga del Atlantis al complejo espacial, una operación orquestada por Magnus, quien fue apodada como la "reina de la descarga" o la "zarina de la descarga", cuando estaba en el módulo ruso.

"Me convertí en una horrible dictadora entre las escotillas", bromeó Magnus, quien recordó que el 99 por ciento del éxito de una misión es gracias a quienes la organizan en tierra, "porque si no, fallas desde el principio".

Magnus, veterana de tres misiones y que ha pasado en total cuatro meses en el espacio, recordó lo "maravilloso" que fue volver a la EEI, que este año cumplió 10 años, y está "en buena forma" para continuar realizando trabajos científicos durante otros 10, dijo.

Al dirigirse a las centenares de personas en el hangar, Walheim, conocido por su buen humor, dijo: "Una de las mejores citas que he leído (el jueves) en el Centro Espacial Kennedy fue 'no lloren porque se ha acabado, sonrían porque ha sucedido'".

Temas

Sigue navegando