La mayor derrota política que ha sufrido un presidente de los Estados Unidos se dio el lunes pasado, generando la mayor pérdida de valor en los mercados de la historia. Votaron en contra de la propuesta 133 representantes del partido Republicano, el partido del propio Presidente junto con 95 demócratas, luego de que se anticipara una aprobación sin problemas. Para explicar lo que sucedió, es necesario tomar en cuenta los siguientes puntos:
1. El Presidente no pudo explicar a profundidad por qué se pedía una especie de cheque en blanco para el Tesoro, y menos del costo total y final serían los 700 mil millones solicitados o si habría más en el futuro.
2. Tampoco se dio énfasis a la idea de que parte de ese enorme monto de dinero podría regresar a las arcas publicas mediante la venta de activos, ni se brindaron mecanismos que evitaran especulación en ese rubro.
3. Los legisladores en su gran mayoría se enfrentan a una difícil reelección debido a lo competido de la carrera por la presidencia, luego no tenían una motivación directa en aprobar una ley que mostraba en los estudios el rechazo de la clase media a la idea de rescatar a las grandes empresas y no a los deudores de las hipotecas.
4. La labor de cabildeo por parte del presidente dejó en evidencia la pérdida de su poder y su baja aprobación, así que los legisladores prefirieron tomar su propio camino a lado de sus electores, dejando solo al Presidente, sobre todo los de propio partido.
5. Los pruritos ideológicos que pregonan por la no intervención estatal surgieron luego que no quedaba claro cómo y cuándo debía privatizarse la cartera de créditos impagadas y los inmuebles embargados.
6. El compromiso de los candidatos a la presidencia de apoyar al plan de rescate fue más un acto mediático que una acción política en la que ellos se implicarán directamente, puesto que esto último tenía un alto costo en compromisos, en un momento clave de la campaña, así que los legisladores no se sintieron presionados en realidad.
7. La acción política de los actores económicos descontaron anticipadamente dando por hecha la aprobación, lo que produjo una sensación de menosprecio a la responsabilidad ´política del Congreso por parte del Ejecutivo, lo que llevó a los representantes a asumir posiciones escuchando a quienes les votarán.
En resumen, imperó la óptica local sobre la perspectiva mundial, produciendo la caída de los mercados.
Así como en 1929 la depresión produjo el llamado “new deal”, ahora debe producirse un “new sistem” para las finanzas que nunca más serán las mismas. Ha llegado al fin la era de la especulación sin límites con papeles sin respaldo, el problema es saber qué es lo que llegará. Lo único claro es que la construcción del nuevo sistema se hará a partir de un nuevo presidente del país más poderoso, pero al lado de Europa, Japón y China, que jugarán un papel vital en los próximos meses.
1. El Presidente no pudo explicar a profundidad por qué se pedía una especie de cheque en blanco para el Tesoro, y menos del costo total y final serían los 700 mil millones solicitados o si habría más en el futuro.
2. Tampoco se dio énfasis a la idea de que parte de ese enorme monto de dinero podría regresar a las arcas publicas mediante la venta de activos, ni se brindaron mecanismos que evitaran especulación en ese rubro.
3. Los legisladores en su gran mayoría se enfrentan a una difícil reelección debido a lo competido de la carrera por la presidencia, luego no tenían una motivación directa en aprobar una ley que mostraba en los estudios el rechazo de la clase media a la idea de rescatar a las grandes empresas y no a los deudores de las hipotecas.
4. La labor de cabildeo por parte del presidente dejó en evidencia la pérdida de su poder y su baja aprobación, así que los legisladores prefirieron tomar su propio camino a lado de sus electores, dejando solo al Presidente, sobre todo los de propio partido.
5. Los pruritos ideológicos que pregonan por la no intervención estatal surgieron luego que no quedaba claro cómo y cuándo debía privatizarse la cartera de créditos impagadas y los inmuebles embargados.
6. El compromiso de los candidatos a la presidencia de apoyar al plan de rescate fue más un acto mediático que una acción política en la que ellos se implicarán directamente, puesto que esto último tenía un alto costo en compromisos, en un momento clave de la campaña, así que los legisladores no se sintieron presionados en realidad.
7. La acción política de los actores económicos descontaron anticipadamente dando por hecha la aprobación, lo que produjo una sensación de menosprecio a la responsabilidad ´política del Congreso por parte del Ejecutivo, lo que llevó a los representantes a asumir posiciones escuchando a quienes les votarán.
En resumen, imperó la óptica local sobre la perspectiva mundial, produciendo la caída de los mercados.
Así como en 1929 la depresión produjo el llamado “new deal”, ahora debe producirse un “new sistem” para las finanzas que nunca más serán las mismas. Ha llegado al fin la era de la especulación sin límites con papeles sin respaldo, el problema es saber qué es lo que llegará. Lo único claro es que la construcción del nuevo sistema se hará a partir de un nuevo presidente del país más poderoso, pero al lado de Europa, Japón y China, que jugarán un papel vital en los próximos meses.