México
En riesgo de desaparecer
El pasado 16 de marzo se llevó a cabo la elección interna del PRD para elegir a su dirigente nacional.
El pasado 16 de marzo se llevó a cabo la elección interna del PRD para elegir a su dirigente nacional. El proceso fue accidentado y a pesar de las irregularidades —ausencia de funcionarios de casilla, quema de boletas, acarreo y utilización de programas sociales para comprar votos, entre otras— el Comité Técnico Electoral del partido dijo que no había necesidad de anular la elección.
Un mes después y ante la crisis de no tener un ganador, Arturo Núñez y Edmundo Cancino —encargados de dicho comité— renunciaron para que otras instancias del partido encontrarán la solución a la crisis post electoral.
El 29 de abril, la Comisión Nacional de Garantías dio por ganador a Alejandro Encinas después de computar 83.95% de las actas. Jesús Ortega denunció ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) el incumplimiento del cómputo y lamentó que dos de los comisionados de la comisión avalaran esas irregularidades “escandalosas e insostenibles”.
Ante dicho panorama, el líder moral y fundador del partido, Cuauhtémoc Cárdenas, dijo que el PRD estaba cada vez más cerca de su disolución; incluso dijo que “aún falta ver lo peor”.
(EL INFORMADOR)
Un mes después y ante la crisis de no tener un ganador, Arturo Núñez y Edmundo Cancino —encargados de dicho comité— renunciaron para que otras instancias del partido encontrarán la solución a la crisis post electoral.
El 29 de abril, la Comisión Nacional de Garantías dio por ganador a Alejandro Encinas después de computar 83.95% de las actas. Jesús Ortega denunció ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) el incumplimiento del cómputo y lamentó que dos de los comisionados de la comisión avalaran esas irregularidades “escandalosas e insostenibles”.
Ante dicho panorama, el líder moral y fundador del partido, Cuauhtémoc Cárdenas, dijo que el PRD estaba cada vez más cerca de su disolución; incluso dijo que “aún falta ver lo peor”.
(EL INFORMADOR)