México
Arrestan en Texas a banda mexicana que robaba gasolina a Pemex
Hace un mes autoridades tuvieron conocimiento que pipas mexicanas vendían gasolina mexicana a muy bajo costo, lo que despertó sospechas
EL PASO TEXAS, ESTADOS UNIDOS.- Agentes del Sheriff del Condado de El Paso, Texas arrestaron a 16 hombres, de los que siete fueron formalmente acusados de distribuir gasolina robada desde México propiedad de PEMEX.
En la oficina del Sheriff dieron a conocer que desde hace un mes tuvieron conocimiento que pipas mexicanas vendían gasolina mexicana a empresas de El Paso a 1.40 dólares el galón, cuando el precio normal actual es de aproximadamente 2.50 lo que despertó sospechas.
Informaron que esa gasolina es robada a la Petróleos Mexicanos ( Pemex) y fue transportada hasta El Paso por la empresa Servicios Especializados Alanís, quienes llevaban el combustible en las pipas con capacidad de ocho mil 500 galones (32.130 litros).
La empresa Servicios Especializados Alanís tiene su sede en la ciudad de Monterrey, Nuevo León y entre los responsables de trasladarla con documentos falsos están Lorenzo Ernesto Nevares Armendáriz, de 45 años de edad; Rafael Córdova, de 44 años; Eliseo Ponce, de 41; José Mendoza Olivas, de 43 y José Dolores Sandoval, de 47, pero esperan hacer mas detenciones.
Al respecto, Eduardo Campa, comandante de la División de Servicios de Soporte del Sheriff, explicó que desde hace un mes recibieron una denuncia anónima, asegurando que existían personas que robaban gasolina de los oleoductos ubicados en el lado este de El Paso y eso fue falso, pero los condujo a un terreno de almacenamiento de trailers, ubicado en la calle Montana, en las afueras al norte de la ciudad, donde notaron actividad sospechosa y procedieron a establecer vigilancia continua durante varias semanas.
Dijo que encontraron que muchas pipas de gasolina, provenientes de una estación legal de suministro en el Condado de El Paso, llegaban a diario al terreno y descargaban varios cientos de galones en simples contenedores de plástico.
Los choferes recibían dinero en efectivo y después continuaban su ruta regular a Ciudad Juárez, para entregar el combustible a una compañía que lo compra del lado mexicano de la frontera.
Las pipas tienen capacidad para aproximadamente ocho mil 500 galones de gasolina, por lo que, en el camino a la vecina ciudad, los conductores hacían una pequeña escala y vendían poco más de 300 galones por viaje, para que no fuera muy notorio al descargar el contenido total en su destino final.
Este producto era comprado por clientes individuales o compañías privadas, que llegaban a cargar gasolina en sus vehículos. Se les cobraba alrededor de 1.40 y 1.80 dólares por galón, entre 50 y 90 centavos más barato que en establecimientos legales, y sin la necesidad de pagar impuestos y eso es un delito de segundo grado en El Paso.
De acuerdo a la información policíaca, el jefe de esta banda es Salvador Armendáriz, de 60 años de edad, y de las 16 personas que detuvieron inicialmente tres eran mexicanos y choferes, así como tres presuntos compradores.
En el terreno donde se dieron las detenciones encontraron alrededor de mil 500 galones de gasolina almacenada y lista para ser vendida.
En la oficina del Sheriff dieron a conocer que desde hace un mes tuvieron conocimiento que pipas mexicanas vendían gasolina mexicana a empresas de El Paso a 1.40 dólares el galón, cuando el precio normal actual es de aproximadamente 2.50 lo que despertó sospechas.
Informaron que esa gasolina es robada a la Petróleos Mexicanos ( Pemex) y fue transportada hasta El Paso por la empresa Servicios Especializados Alanís, quienes llevaban el combustible en las pipas con capacidad de ocho mil 500 galones (32.130 litros).
La empresa Servicios Especializados Alanís tiene su sede en la ciudad de Monterrey, Nuevo León y entre los responsables de trasladarla con documentos falsos están Lorenzo Ernesto Nevares Armendáriz, de 45 años de edad; Rafael Córdova, de 44 años; Eliseo Ponce, de 41; José Mendoza Olivas, de 43 y José Dolores Sandoval, de 47, pero esperan hacer mas detenciones.
Al respecto, Eduardo Campa, comandante de la División de Servicios de Soporte del Sheriff, explicó que desde hace un mes recibieron una denuncia anónima, asegurando que existían personas que robaban gasolina de los oleoductos ubicados en el lado este de El Paso y eso fue falso, pero los condujo a un terreno de almacenamiento de trailers, ubicado en la calle Montana, en las afueras al norte de la ciudad, donde notaron actividad sospechosa y procedieron a establecer vigilancia continua durante varias semanas.
Dijo que encontraron que muchas pipas de gasolina, provenientes de una estación legal de suministro en el Condado de El Paso, llegaban a diario al terreno y descargaban varios cientos de galones en simples contenedores de plástico.
Los choferes recibían dinero en efectivo y después continuaban su ruta regular a Ciudad Juárez, para entregar el combustible a una compañía que lo compra del lado mexicano de la frontera.
Las pipas tienen capacidad para aproximadamente ocho mil 500 galones de gasolina, por lo que, en el camino a la vecina ciudad, los conductores hacían una pequeña escala y vendían poco más de 300 galones por viaje, para que no fuera muy notorio al descargar el contenido total en su destino final.
Este producto era comprado por clientes individuales o compañías privadas, que llegaban a cargar gasolina en sus vehículos. Se les cobraba alrededor de 1.40 y 1.80 dólares por galón, entre 50 y 90 centavos más barato que en establecimientos legales, y sin la necesidad de pagar impuestos y eso es un delito de segundo grado en El Paso.
De acuerdo a la información policíaca, el jefe de esta banda es Salvador Armendáriz, de 60 años de edad, y de las 16 personas que detuvieron inicialmente tres eran mexicanos y choferes, así como tres presuntos compradores.
En el terreno donde se dieron las detenciones encontraron alrededor de mil 500 galones de gasolina almacenada y lista para ser vendida.