Jalisco
Pagan deuda con préstamos 17 municipios de Jalisco
Los ayuntamientos 'desordenados' han tenido que refinanciar empréstitos por un monto de mil 887 millones de pesos
GUADALAJARA, JALISCO (15/DIC/2014).- En lo que va de la administración estatal, un total de 17 municipios de Jalisco han adquirido deuda para refinanciar otras contratadas en años pasados. Se trata de un monto de mil 887 millones 843 mil 270 pesos que han sido registrados por el Gobierno estatal a través de la Subsecretaría de Finanzas.
Municipios “desordenados” en sus finanzas es la constante, pero además planificaron mal dos cosas: el momento en el que adquirieron la deuda y los términos con que se fijó el empréstito con la banca; la segunda es que no previeron que su gasto corriente podría comprometer el pago de abonos planificados de manera original.
Con estas ideas se queda el titular de la Secretaría de Planeación, Administración y Finanzas (Sepaf), Héctor Rafael Pérez Partida, quien habló para esta casa editorial a unos días de dejar la Subsecretaría de Finanzas.
De acuerdo con un reporte conseguido vía Ley de Transparencia, la Sepaf registra 74 deudas adquiridas por ayuntamientos y diversos poderes públicos, desde marzo de 2013. Mientras el Gobierno estatal logró refinanciar la deuda a intereses menores, logrando un ahorro de 200 millones de pesos (MDP), hay municipios que no han podido sortear sus problemas financieros. Estos municipios son: Zapotlán el Grande, Zapopan, Tala, Tamazula de Gordiano, Juchitlán, Tizapán el Alto, Ixtlahuacán de los Membrillos, Jocotepec, Yahualica, Tequila, Atenguillo, Tecolotlán, Tuxcacuesco, Teocuitatlán de Corona, Tapalpa, Sayula y San Juanito Escobedo.
Estos ayuntamientos han recurrido, en su mayoría, a la banca pública para financiar créditos que se contrataron en meses pasados. Pero al revisar la situación de las comunas, el Gobierno estatal puso más condicionantes para volverse a endeudar: la deuda que registrarían no tendría el aval del Ejecutivo si era para gasto corriente. Además, la obligación que propuso Banobras es que los montos contratados deberían pagarse antes que concluyan las administraciones, por lo que se les viene el tiempo encima a cuatro ayuntamientos. Para asegurar que pagarán, la Sepaf retiene el dinero que llega de la Federación.
Ocho de cada 10 pesos que tiene un municipio para su gasto provienen de fondos federales y estatales. Los ayuntamientos sólo tienen entradas económicas por el pago de predial y licencias para la operación de negocios y para la construcción de inmuebles.
El municipio cuya reestructura financiera es de mayor cuantía es Zapopan. El 14 de marzo pasado registró una deuda con el banco Banorte de mil 237 millones de pesos, pagaderos a 15 años. Parte de ese crédito debió invertirse en obra pública durante la pasada administración cuando se solicitaron dos créditos que no se ejercieron, pero como este diario lo publicó en noviembre de 2013, el dinero se malgastó.
Municipios “desordenados” en sus finanzas es la constante, pero además planificaron mal dos cosas: el momento en el que adquirieron la deuda y los términos con que se fijó el empréstito con la banca; la segunda es que no previeron que su gasto corriente podría comprometer el pago de abonos planificados de manera original.
Con estas ideas se queda el titular de la Secretaría de Planeación, Administración y Finanzas (Sepaf), Héctor Rafael Pérez Partida, quien habló para esta casa editorial a unos días de dejar la Subsecretaría de Finanzas.
De acuerdo con un reporte conseguido vía Ley de Transparencia, la Sepaf registra 74 deudas adquiridas por ayuntamientos y diversos poderes públicos, desde marzo de 2013. Mientras el Gobierno estatal logró refinanciar la deuda a intereses menores, logrando un ahorro de 200 millones de pesos (MDP), hay municipios que no han podido sortear sus problemas financieros. Estos municipios son: Zapotlán el Grande, Zapopan, Tala, Tamazula de Gordiano, Juchitlán, Tizapán el Alto, Ixtlahuacán de los Membrillos, Jocotepec, Yahualica, Tequila, Atenguillo, Tecolotlán, Tuxcacuesco, Teocuitatlán de Corona, Tapalpa, Sayula y San Juanito Escobedo.
Estos ayuntamientos han recurrido, en su mayoría, a la banca pública para financiar créditos que se contrataron en meses pasados. Pero al revisar la situación de las comunas, el Gobierno estatal puso más condicionantes para volverse a endeudar: la deuda que registrarían no tendría el aval del Ejecutivo si era para gasto corriente. Además, la obligación que propuso Banobras es que los montos contratados deberían pagarse antes que concluyan las administraciones, por lo que se les viene el tiempo encima a cuatro ayuntamientos. Para asegurar que pagarán, la Sepaf retiene el dinero que llega de la Federación.
Ocho de cada 10 pesos que tiene un municipio para su gasto provienen de fondos federales y estatales. Los ayuntamientos sólo tienen entradas económicas por el pago de predial y licencias para la operación de negocios y para la construcción de inmuebles.
El municipio cuya reestructura financiera es de mayor cuantía es Zapopan. El 14 de marzo pasado registró una deuda con el banco Banorte de mil 237 millones de pesos, pagaderos a 15 años. Parte de ese crédito debió invertirse en obra pública durante la pasada administración cuando se solicitaron dos créditos que no se ejercieron, pero como este diario lo publicó en noviembre de 2013, el dinero se malgastó.