Internacional
Talibán se extiende por Afganistán: ONU
Según el representante de la ONU para Afganistán “en julio y agosto se produjeron el mayor número de incidentes de seguridad desde 2002”
NACIONES UNIDAS.- La
Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió hoy de que la insurgencia talibán se extendió más allá de sus bastiones en el sur y el oriente de Afganistán y llegó a las provincias cercanas a Kabul en medio de un recrudecimiento de la violencia.
El enviado especial de la ONU para Afganistán, el noruego Kai Eide, indicó en una intervención ante el Consejo de Seguridad de la ONU que "en julio y agosto se produjeron el mayor número de incidentes de seguridad desde 2002" en ese país.
Señaló que la influencia de los insurgentes llegó a zonas próximas a Kabul y se registra un aumento de los ataques a civiles, entre ellos cooperantes humanitarios y proyectos de desarrollo. La violencia aumentó entre julio y agosto pasado un 40 por ciento comparado con los mismos meses de 2007.
De acuerdo con el funcionario, se espera que los talibanes estén activos durante los próximos meses de invierno. No obstante, Eide pidió en su comparecencia ante el Consejo de Seguridad que no se caiga en el "pesimismo de algunas de las declaraciones" escuchadas recientemente.
Según Eide, la colaboración entre Afganistán y su vecino Pakistán mejoró en los últimos meses para enfrentar a los rebeldes que utilizan el suelo paquistaní para atacar al Gobierno de Kabul ya las tropas internacionales que lo respaldan. "La comunidad internacional tiene que alentar esta relación", apuntó.
Para el enviado de la ONU, el fortalecimiento del ministerio del Interior y los cambios efectuados en el de Agricultura para asistir a un sector, que, según él, ha sido "ignorado por demasiado tiempo", es algo positivo. A ello, se agrega "la cierta mejora" en la lucha contra el narcotráfico que revelan las recientes estadísticas, las cuales indican que la producción de opio se limita ahora al sur del país.
Advirtió que la comunidad internacional debe intensificar su asistencia humanitaria al país para combatir el impacto del encarecimiento de los alimentos.
Por su parte, Estados Unidos (EU) aprovechó el turno de las intervenciones de los miembros del órgano para destacar que su país lamentaba la muerte de civiles en las operaciones llevadas a cabo por las tropas estadounidenses y por las fuerzas de la OTAN.
"Quiero asegurar a los miembros del Consejo de que haremos todo lo que esté en nuestro poder para estar seguros de que se toman todo tipo de precauciones para evitar la muerte de civiles", afirmó el embajador de EU ante la ONU, Zalmay Khalilzad.
El Pentágono reconoció el pasado 8 de octubre que en un ataque militar desarrollado el 22 de agosto contra insurgentes en Herat murieron 33 civiles, muchos más de los admitidos anteriormente.
El aumento de las muertes de civiles en los bombardeos de fuerzas internacionales es un problema delicado para el gobierno afgano, que acusa a estas tropas de minar su credibilidad entre la población.
El enviado especial de la ONU para Afganistán, el noruego Kai Eide, indicó en una intervención ante el Consejo de Seguridad de la ONU que "en julio y agosto se produjeron el mayor número de incidentes de seguridad desde 2002" en ese país.
Señaló que la influencia de los insurgentes llegó a zonas próximas a Kabul y se registra un aumento de los ataques a civiles, entre ellos cooperantes humanitarios y proyectos de desarrollo. La violencia aumentó entre julio y agosto pasado un 40 por ciento comparado con los mismos meses de 2007.
De acuerdo con el funcionario, se espera que los talibanes estén activos durante los próximos meses de invierno. No obstante, Eide pidió en su comparecencia ante el Consejo de Seguridad que no se caiga en el "pesimismo de algunas de las declaraciones" escuchadas recientemente.
Según Eide, la colaboración entre Afganistán y su vecino Pakistán mejoró en los últimos meses para enfrentar a los rebeldes que utilizan el suelo paquistaní para atacar al Gobierno de Kabul ya las tropas internacionales que lo respaldan. "La comunidad internacional tiene que alentar esta relación", apuntó.
Para el enviado de la ONU, el fortalecimiento del ministerio del Interior y los cambios efectuados en el de Agricultura para asistir a un sector, que, según él, ha sido "ignorado por demasiado tiempo", es algo positivo. A ello, se agrega "la cierta mejora" en la lucha contra el narcotráfico que revelan las recientes estadísticas, las cuales indican que la producción de opio se limita ahora al sur del país.
Advirtió que la comunidad internacional debe intensificar su asistencia humanitaria al país para combatir el impacto del encarecimiento de los alimentos.
Por su parte, Estados Unidos (EU) aprovechó el turno de las intervenciones de los miembros del órgano para destacar que su país lamentaba la muerte de civiles en las operaciones llevadas a cabo por las tropas estadounidenses y por las fuerzas de la OTAN.
"Quiero asegurar a los miembros del Consejo de que haremos todo lo que esté en nuestro poder para estar seguros de que se toman todo tipo de precauciones para evitar la muerte de civiles", afirmó el embajador de EU ante la ONU, Zalmay Khalilzad.
El Pentágono reconoció el pasado 8 de octubre que en un ataque militar desarrollado el 22 de agosto contra insurgentes en Herat murieron 33 civiles, muchos más de los admitidos anteriormente.
El aumento de las muertes de civiles en los bombardeos de fuerzas internacionales es un problema delicado para el gobierno afgano, que acusa a estas tropas de minar su credibilidad entre la población.